Jugadores y coaches de NBA resienten soledad de los viajes
Cuando el entrenador de Washington Scott Brooks jugaba, solía preguntar cómo era la profesión de quienes lo dirigían. La respuesta que recibia de esos coaches siempre era la misma: es un trabajo solitario.
Ahora lo es quizá más que nunca.
Como si no fuera suficientemente difícil disputar encuentros en arenas que están práctica o completamente vacías mientras continúa la pandemia, las reglas para los jugadores y entrenadores —en casa y de visita— serán más estrictas.
La NBA y la Asociación de Jugadores acordaron el martes endurecer los protocolos, incluyendo las estipulaciones de que jugadores y entrenadores tendrán que quedarse en sus hoteles durante los viajes, excepto para las actividades relacionadas con el equipo y sin recibir visitas.
Incluso sin las nuevas reglas, la soledad y el aislamiento han sido el sello de las giras en esta temporada. El coach de Denver Michael Malone no pudo visitar a su familia cuando los Nuggets visitaron Nueva York.
“Una gran parte de volver acá ha sido siempre la oportunidad de ver a mi madre, a mi padre, hermanos, hermanas y amigos, y ese no ha sido el caso este año”, dijo Malone. “Entonces definitivamente esto te quita la oportunidad”.
Las reglas de la NBA deben supeditarse a las regulaciones locales, de las que Los Ángeles tiene las más restrictivas. El coach de Chicago Billy Donovan dijo que los Bulls sólo pudieron contar con una persona en la sala de entrenamiento en el hotel cuando enfrentaron a los Lakers y los Clippers en el Staples Center.
“Los chicos básicamente están encerrados en sus cuartos”, dijo Donovan. “Hay mucho poco que podamos hacer. Los días son largos para estos chicos”.
Y desde la perspectiva de la NBA, Los Ángeles será como el resto de los Estados Unidos al menos en el próximo par de semanas.
“Es difícil. Los partidos terminan y uno regresa y come de un recipiente de plástico”, dijo el coach de San Antonio, Gregg Popovich, a quien le gusta visitar restaurantes en sus viajes, especialmente aquellos con una buena selección de vino.
Las más recientes reglas fueron acordadas por la liga y la NBPA. Pero no fueron bien recibidas por todos.
El base de Oklahoma City George Hill dejó en claro que no era un fan de las nuevas restricciones —incluyendo las que dicen que los jugadores y entrenadores tendrían básicamente que aislarse durante las giras.
“Si es tan serio, entonces no deberíamos estar jugando”, indicó Hill.