Protestas en Minneapolis por la muerte de un hombre negro a manos de la policía
Cientos de personas se manifestaron el domingo por la noche en Minneapolis (Estado de Minnesota, EE UU) después de que un ciudadano negro muriera por los disparos de la policía tras detener su vehículo. Precisamente en Minneapolis se está celebrando el juicio contra el exagente Derek Chauvin por la muerte de George Floyd, el 25 de mayo del pasado año. Los manifestantes protestaron frente a la estación policial en Brooklyn Center, al noroeste de la ciudad, y aproximadamente a 16 kilómetros de donde perdió la vida Floyd. Para disolver la concentración, la policía disparó gas lacrimógeno y granadas aturdidoras.
La víctima, abatida por disparos de un agente tras un control policial por una infracción de tráfico, ha sido identificado como Daunte Wright, de 20 años. El joven llamó por teléfono a su madre, Katie Wright, después de que la policía detuviera su vehículo. Según la versión de la madre, escuchó a agentes de policía decirle a su hijo que soltara el teléfono y luego uno de ellos cortó la llamada. Poco después, la novia de su hijo le dijo que Wright había sido tiroteado mortalmente.
La oficina de asuntos criminales de Minnesota confirmó a AFP que está “investigando” la implicación de un agente en los disparos en Brooklyn Center, pero se negó a identificar a la víctima. Según un comunicado del departamento policial, los agentes ordenaron detener al conductor de un vehículo por una infracción de circulación. Cuando descubrieron que tenía una orden de detención pendiente, intentaron arrestarlo. El conductor volvió a su vehículo, y uno de los oficiales disparó su arma, alcanzando al conductor, que murió en el lugar de los hechos.
Después de las protestas, se ha puesto en marcha un toque de queda hasta las seis de la mañana de este lunes, según el alcalde de Brooklyn Center, Mike Elliott. “Queremos estar seguros de que todos están bien. Por favor, estén seguros y vayan a casa”, dijo Elliot en un tuit a los manifestantes.
La muerte de Floyd, de 46 años, desató una ola internacional de manifestaciones contra el racismo y la brutalidad policial, que llegó a más de medio centenar de países e impulsó el movimiento Black Lives Matter. Este nuevo episodio podría volver a encender la chispa de la protesta social contra el trato de los agentes a los afroamericanos.