Mujer muerta en Guaricanos: padre dice jóvenes jugaban con juguetes
La trágica muerte de Luisa Yandery Acevedo, de 34 años, madre de tres hijas adolescentes y a su corta edad abuela, ha generado indignación y preguntas sobre el proceder de la Policía Nacional en República Dominicana.
Según relata José Luis Acevedo, padre de Luisa Yandery, esta perdió la vida tras ser alcanzada por un disparo mientras compraba una hélice para un abanico, en el sector Los Guaricanos, de Santo Domingo Norte.
«Habían dos muchachos jugando con pistolas de bolitas, llegó una patrulla y empezaron a disparar porque creyeron que eran armas de fuego» Padre de Luisa Yandery
En medio del tiroteo, un proyectil impactó a Luisa por la espalda. «Mi hija cayó boca abajo y se ahogó», agregó, con la voz quebrada por el dolor.
Dice no le aceptaron la denuncia
José Luis expresó su frustración al intentar querellarse en el Departamento de Captura de Prófugos, donde asegura que no le aceptaron la denuncia.
«Esto fue un error de la Policía, y como siempre, se tapan entre ellos. Aquí nadie quiere pagar por un muerto» Padre de Luisa Yandery Acevedo
Además, denunció que los agentes recogieron el cuerpo de su hija sin la presencia de un médico legista y lo trasladaron al hospital Ney Arias Lora, incumpliendo los procedimientos legales.
Una vida dedicada a sus hijas
Luisa Yandery, descrita como una mujer alegre y guerrera, era el sustento de sus tres hijas, de 13, 15 y 17 años, y de un nieto, a quien consideraba su debilidad.
«Vivía por sus hijas, trabajaba en lo que apareciera para sacarlas adelante», recordó su padre, quien vino desde El Seibo al enterarse de la triste noticia.
La pérdida de Luisa no solo deja un vacío en su familia, sino también en la comunidad que la conocía. Mientras José Luis asegura haber perdido la esperanza en las autoridades, aún guarda una pequeña luz de justicia:
- «Espero que las autoridades aclaren este caso, aunque sé cómo se manejan las cosas aquí».
La familia de Luisa Yandery Acevedo, en medio de su dolor, sigue clamando por respuestas, con la esperanza de que su tragedia no quede en el olvido.
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