Minneapolis espera en vilo el juicio por el asesinato de George Floyd: “Chauvin está en el banquillo, pero se juzga a EE UU”
La familia de George Floyd ha clamado este domingo por última vez para que se haga justicia por la muerte del afroamericano antes de que arranque este lunes el juicio contra el expolicía Derek Chauvin, acusado de asesinato. En una vigilia nocturna celebrada en un ambiente bastante festivo en una iglesia baptista al sur de Minneapolis, los hermanos del símbolo del movimiento racial urgieron reformar la policía y se encomendaron a Dios entre cánticos y eufóricos discursos. “El sistema de justicia penal será juzgado mañana”, sostuvo el reverendo Al Sharpton. “Chauvin está en la sala del tribunal, pero Estados Unidos está siendo juzgado”, agregó.
Los tres grados de temperatura de la noche de este domingo no impidieron que decenas de activistas y vecinos se acercaran a la iglesia Greater Friendship Missionary e hicieran fila en la intemperie para poder entrar. Ben Crump, el abogado de la familia Floyd, calificó el juicio que tiene a la ciudad con seguridad especial como “un referéndum” sobre lo lejos que ha llegado la comunidad afroamericana en su “búsqueda para lograr la igualdad”. Aunque puso en evidencia que incluso si condenan a Chauvin, no va a devolverle la vida a George Floyd. “Puede restaurar la esperanza en un sistema que debería incluir a todos los ciudadanos”, dijo el abogado. A mediados de marzo el Ayuntamiento de Minneapolis acordó pagar 27 millones de dólares a la familia de Floyd.
Derek Chauvin, de 44 años, enfrenta cargos de asesinato en segundo grado, asesinato en tercer grado y homicidio en segundo grado y arriesga un máximo de 41,5 años en prisión. Philonise Floyd, hermano de quien se ha convertido en un mártir del movimiento Black Lives Matter, urgió esta noche entre gritos de apoyo sobre la necesidad de poner fin a la inmunidad policial y acabar con “los dos sistemas judiciales, el para blancos y el para negros”. “Dame una condena, dale al mundo lo que quiere ver”, sostuvo apelando a la sentencia que deberá definir el jurado en medio de una altísima expectación. Por primera vez en Minnesota, el juicio se transmitirá en vivo.
El reverendo Sharpton se refirió a la cantidad de muertes en manos de la policía donde los agentes involucrados no fueron acusados de un crimen, como el caso de Eric Garner en Nueva York, cuya madre estaba esta noche entre los presentes. El activista remarcó que el lunes no solo comienza el juicio contra Chauvin, sino también una oportunidad para que el Estados Unidos responsabilice a la policía de sus malas prácticas.
A media hora de la iglesia baptista en la que ha tenido lugar la vigilia, decenas de manifestantes se reunían en la autodenominada plaza de George Floyd, ubicada en la intersección donde el afroamericano perdió la consciencia bajo la rodilla de Chauvin durante ocho minutos y 46 segundos. Los organizadores tenían 500 velas, pero no llegaron más de una veintena de personas al homenaje al potente memorial plagado de enseñas reivindicativas sobre la comunidad negra, decorado con flores y peluches desde el pasado 25 de mayo. Ahí fue donde la hija de seis años de George Floyd dijo “papá cambió el mundo”. Este lunes arranca el juicio que determinará si cambió la manera de operar del sistema judicial.