Lidom debería cuidar mejor su imagen
La temporada de béisbol invernal de la República Dominicana comienza mañana, en un torneo dedicado a don José León Asensio, in memoriam, pero en vez de hablar de la intensidad de nuestra pelota, parecería que hay más noticias negativas en el tapete que el Licey buscando su tercera corona seguida o que Albert Pujols debuta como manager.
No está en el tapete que Miguel Tejada regresa a las Águilas Cibaeñas como coach, pero tampoco estamos hablando del equipazo que tienen los Gigantes del Cibao, o lo interesantes que lucen los Toros del Este o las Estrellas Orientales.
No, de lo que se habla en la pelota dominicana es que las Estrellas Orientales comenzarán la campaña sin poder jugar en casa durante la primera semana porque se retrasaron los trabajos del terreno de juego en el estadio Tetelo Vargas y hubo un reajuste en el calendario que Lidom oficialmente no notificó sino que dejó que las Estrellas enviaran una nota de prensa informando la situación.
Pero tampoco estamos hablando lo suficiente de que Juan Francisco vuelve al Licey, probablemente para retirarse con esa camiseta, sino que tenemos la duda de que el terreno de juego del Estadio Quisqueya Juan Marichal esté en condiciones para recibir un juego diario por los próximos cuatro meses, luego de celebrar demasiados conciertos en el verano y los jardines quedaron estropeados.
No se habla de la corona 25 que busca el Licey sino del vergonzoso pleito entre los organizadores de Latin Events y una liga que anunció un evento hace mas de un mes y a esta altura de juego, con ventas de boletas corriendo tanto por los Yanquis como por los Mets de Nueva York, tanto Licey como Lidom ponen en dudas la celebración del evento.
Un representante de Latin Events, el abogado Julio Cury, públicamente ha cuestionado la capacidad del presidente de Lidom, al tiempo que ha desconocido la legalidad de la Federación Nacional de Peloteros Profesionales, entre otras cosas.
Del lado de Lidom, específicamente del lado del Licey, han dejado la impresión de que no quieren la celebración de la serie en Nueva York. ¿Quién los está obligando? ¿No se supone que son socios comerciales de ese evento y que recibirán alrededor de un millón de dólares por sus tres partidos de exhibición?
Luce que a lo interno de Lidom no se dan cuenta qué tan importantes son para la sociedad y que deberían enfocarse un poco más.