Ningún partido se ha acercado a la mayoría de los latinos en la recta final de la campaña
Kamala Harris consolida su ventaja frente a Donald Trump entre los latinos, un sector clave del electorado compuesto por 36 millones de personas con derecho a voto. A casi dos meses de las elecciones presidenciales, la candidata demócrata cuenta con 27 puntos de ventaja frente a su rival republicano entre los hispanos (58,5% contra 32,4%), de acuerdo a un sondeo auspiciado por Unidos US, una de las mayores organizaciones latinas en Estados Unidos y que en mayo llamó a votar por Joe Biden. Sin embargo, la mayoría de los latinos no han sido contactados por ninguno de los dos grandes partidos en la recta final de la campaña rumbo al 5 de noviembre. La contienda será la primera o segunda cita electoral para el 37% de la comunidad.
La encuesta refleja la explosión demográfica que los latinos, que han sumado cuatro millones de personas al padrón de votantes desde 2020. “Es una cifra sorprendente: El 37% de los latinos en el electorado son nuevos desde que se enfrentaron Donald Trump y Hillary Clinton en 2016, es un conjunto fundamentalmente diferente”, ha señalado Gary Segura, fundador de BSP Research. La empresa levantó la encuesta en agosto con una muestra de 3.000 hispanos en los territorios clave de Georgia, Carolina del Norte, Arizona, Pensilvania, Nevada, Florida, Texas y California.
El sondeo indica que Harris adelanta a Trump en los Estados bisagra, que definirán los comicios. El expresidente mejoró su popularidad entre los latinos en 2020, pero las cifras de intención de voto reveladas esta mañana lo colocan abajo del 38% registrado hace cuatro años. Harris también está marginalmente por debajo (0,5%) del voto latino que obtuvo Joe Biden. El 47% de los encuestados cree que el Partido Republicano no se preocupa por los latinos y el 26% percibe que la organización es abiertamente hostil contra los hispanos, frente al 7% que siente lo mismo de los demócratas.
Casi un tercio de los potenciales votantes, el 28%, no confía en que los partidos lucharán por ellos en los temas que más les inquietan. Estos son la inflación y el aumento de los precios y la gasolina, el costo de la vivienda, el acceso a la salud y a empleos mejor pagados. Otro sondeo reciente de Reuters/Ipsos confirma que la abanderada demócrata aventaja a Trump en las propuestas para atender estos problemas, aunque el margen se cierra a solo 13 puntos.
Gary Segura señala que las preocupaciones económicas preceden al tema migratorio entre los hispanos, incluso en bastiones conservadores como Florida o Texas. La inmigración irregular ha sido desplazada a la quinta prioridad. “Virtualmente, no hay apoyo a las deportaciones masivas, un tema del que se ha hablado en el actual clima político”, señaló el analista. En cambio, los encuestados prefieren un camino a la regularización para quienes llevan más tiempo viviendo en el país y para los 3,6 millones de dreamers que esperan una resolución a su situación legal tras una espera de más de 20 años. La mayoría, por un margen de 50%, se opone también a prohibir el aborto, sin importar sus creencias personales.
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Señal de alerta
“Una vez más, los latinos están mandando una señal de alerta a ambos partidos. Aunque los republicanos hayan ganado algo de apoyo que han perdido frente a los latinos, es también claro que las prioridades del partido y sus políticas están muy fuera de lugar entre las preocupaciones y posiciones de la mayoría de la comunidad”, señaló a un grupo de periodistas Janet Murgía, la presidenta de Unidos US. La organización que ha auxiliado para registrarse a votar a un millón de personas en 20 años. Unidos US invitó a Biden para cerrar su conferencia anual en julio pasado, pero el presidente canceló su participación en la reunión de Las Vegas tras dar positivo a coronavirus.
El 64% de la gente contactada por BSP en encuestas telefónicas y por Internet afirma que votará en las elecciones, ya sea de forma presencial o por correo. Otro 15% dice que aún se lo está pensando. A pesar de que el 5 de noviembre se acerca rápidamente y con un puñado de territorios en disputa, los analistas afirman que la mayoría de los potenciales votantes no ha sido contactada por ninguno de los dos grandes partidos para registrarse para votar.
“A menudo escuchamos un lenguaje que desdeña la participación latina, que no votan tanto como deberían, que te pueden decepcionar cuando cuentas con ellos, pero nadie se refiere al elefante en el cuarto: que es que nadie le está pidiendo a los latinos que salgan a votar. El 55% de los latinos no han sido contactados al inicio del final de la campaña”, dice Segura. En Florida, un bastión republicano, la cifra llega al 60%.
Nevada, el más motivado
El contacto de los partidos parece ser vital en una elección cerrada como la que se pronostica para el otoño. Es lo que deja ver el caso de Nevada, uno de los siete Estados que definirán los comicios. Los potenciales votantes hispanos han sido contactados dos veces en las últimas tres semanas. El 72% de los latinos de la entidad asegura que participará en la elección. El entusiasmo es mucho menor en Carolina del Norte y Georgia, donde solo han mostrado interés el 58% y el 56%, respectivamente. El 20% de los hispanos en Georgia asegura que no votará a pesar de que esta será la primera o segunda elección presidencial para el 40% del electorado.
Mantener energizado a un votante novel es clave para los dos partidos. El resultado no solo se verá en la elección presidencial, sino en la composición del nuevo Congreso, que será determinante para quien sea que ocupe la Casa Blanca desde enero de 2025. Los demócratas tienen una ventaja de 26 puntos sobre los republicanos en los distritos que están en juego en la Cámara de Representantes, de acuerdo a la encuesta publicada por Unidos US. Sin embargo, la balanza puede inclinarse para cualquier lado porque el 20% sigue estudiando a qué representante va a votar.
Las encuestas en manos de Unidos US también colocan a los candidatos demócratas al Senado entre los preferidos de la comunidad. Es especialmente llamativa la carrera entre Ted Cruz y George Allred en Texas. Cruz, uno de los republicanos más controversiales de la Cámara Alta tiene el 31% de intención de voto entre los latinos, mientras que su rival demócrata cuenta con el 51%, y aún hay un 18% que no se ha decidido. La contienda estatal, no obstante, se cierra cuando se suman los votantes blancos. En Arizona, el demócrata Rubén Gallego aventaja 55% contra 25% a la trumpista Kari Lake. El senador republicano Rick Scott de Florida también está a la zaga entre los votantes latinos. El pronóstico de BSP le da una intención de voto de 37% frente al 41% de su rival, Debbie Mucarsel-Powell. En esta contienda, no obstante, hay 22% de indecisos.