Vivienda cuelga en despeñadero al derrumbarse cerca de cañada
Hace nueve meses que la familia de César Morillo perdió su hogar por las lluvias de julio del año pasado, al desplomarse su vivienda en la calle G casi esquina Penetración en la urbanización El Edén de Villa Mella.
Aunque no ha tenido que lamentar daños humanos, la casa que construyó con mucho esfuerzo en un área verde, próximo a una cañada, se desplomó por completo, dejando un hueco a mitad de la calle que constituye un peligro para conductores y peatones.
Morillo ha tenido que buscar donde vivir porque la mole de cemento casi intacta permanece colgante del despeñadero que da a la cañada.
Al parecer, el terreno cedió con las lluvias y fue separando la vivienda poco a poco hasta movilizar los cimientos y virar casi por completo la edificación. Ha tenido que alquilar una casa en el sector donde tiene lo que rescató de su vivienda.
La casa completa sigue inclinada con amenaza de terminar de desplomarse, sin embargo, ninguna autoridad se ha interesado en el caso, visible desde que se transita por la calle principal de El Edén.
El problema no solo afecta a César y a su familia que se quedaron sin techo, sino a los vecinos porque el tramo de calle afectado quedó casi colgando y cualquier conductor que no conozca el lugar puede accidentarse o una persona a pie.
La estructura debe ser demolida para evitar que caiga a la cañada y la tape porque que está a escasos metros del lugar.