Arnemann Personal Beauty celebra Black Friday al estilo de los 80
En un giro innovador y lleno de energía, Mariale Ovalles Arnemann, la CEO del centro de belleza Arnemann Personal Beauty, decidió romper con las convenciones del Black Friday y llevar a sus clientes a un viaje lleno de glamour y diversión inspirado en los vibrantes años 80.
«Para esta fiesta con motivo de Black Friday, quisimos hacer algo diferente. Por lo general, Black Friday se asocia con ofertas y tonos oscuros, pero nosotros quisimos salirnos de ahí», expresa entusiasmada Mariale Ovalles Arnemann.
El centro de belleza se transformó en un caleidoscopio de colores vibrantes, luces parpadeantes y mucho brillo, transportando a todos los presentes a una época llena de exuberancia y estilo.
La dinámica interactiva fue la clave, con un personal comprometido que se movía y accionaba al ritmo de los años 80, creando una experiencia única y envolvente.
Durante dos días llenos de emociones, los clientes de Arnemann Personal Beauty tuvieron la oportunidad de disfrutar de atractivos descuentos y sorpresas en cada rincón. La atmósfera festiva fue realzada con brindis y entretenimiento en pleno salón, creando un ambiente festivo y acogedor.
Para agregar un toque de interactividad digital, aquellos clientes que compartieron fotografías del evento en sus redes sociales etiquetando al salón recibieron descuentos adicionales, incentivando a todos a compartir la experiencia única que estaban viviendo.
Un Black Friday de los 80
- La visión de Mariale era clara: quería que cada cliente se sumergiera en la magia de los años 80 y se fuera no solo más bella, sino también más feliz por la energía y la vibra única que impregnaba el lugar.
«Nosotros no queremos ser lo tradicional, sino que queremos salir de ahí», destaca Mariale. Con más de 30 años de experiencia ofreciendo experiencias inolvidables, Arnemann Personal Beauty se ha ganado la reputación de ser un lugar innovador y vanguardista en el mundo de la belleza.
La expectativa para el fin de semana era recibir a alrededor de 250 personas, y la respuesta no pudo ser mejor. Los clientes que se unieron a la celebración no solo aprovecharon las ofertas especiales, sino que también se sumaron al espíritu festivo, integrándose y bailando al ritmo de los años 80.
«La idea es inyectar esa positividad, esa alegría, esa diversión con todo el equipo, porque aquí nos consideramos una familia y realmente queremos que todo el que llegue se sienta en su casa», concluye Mariale Ovalles Arnemann.
Arnemann Personal Beauty ha demostrado una vez más que la innovación y la creatividad pueden transformar incluso las tradiciones más arraigadas, ofreciendo a sus clientes una experiencia única e inolvidable.
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