Las transmisiones de Grandes Ligas en EEUU
Desde hace un par de semanas, las Grandes Ligas están lidiando con una situación que podría poner en peligro una cuota importante de los ingresos de 17 organizaciones que llevan sus transmisiones de televisión regional por la cadena Bally Sports.
Bally Sports es una empresa creada por el grupo Diamond, que a su vez compró los derechos de transmisión regional de organizaciones como los Padres de San Diego, Bravos de Atlanta, Reales de Kansas City, para nombrar tres de los 14 de bajo su sombrilla.
Ese movimiento se produjo luego que Disney adquiriera la empresa Fox y para evitar penalidades antimonopolio se vieron obligados a vender.
Pero hoy Diamond Group se encuentra cerca de declararse en bancarrota, con deudas que superan los US$9 mil millones, a pesar de que las transmisiones de Bally Sports son muy rentables.
El otro emporio, AT&T SportsNet, maneja a los Astros, Piratas y Rockies y ya les dijo que no tenía cómo operar este año. Desde hace un tiempo, los principales ejecutivos de las mayores han ponderado la posibilidad de tener un control centralizado de los derechos de transmisión de televisión, algo similar a lo que la NFL maneja como organismo y le genera muchos, muchos beneficios.
¿Será este el futuro de MLB? Hay que esperar a ver lo que sucede en ese sentido, porque un negocio de ese tipo tendría que contar con la bendición del sindicato de jugadores de Grandes Ligas.
Pero el comisionado Rob Manfred se ha movido rápido y bien para evitar conflictos que puedan representar un obstáculo para las transmisiones o los ingresos de los equipos de manera individual.