Embajada Alemana honra las 189 víctimas del vuelo caído hace 25 años en Puerto Plata

La Embajada Alemana en República Dominicana y autoridades nacionales y locales, honraron este sábado la memoria de las 189 personas que murieron en el accidente aéreo ocurrido hace 25 años cuando un Boeing 757-225 operado por la compañía Birgen Air se precipitó abruptamente a las aguas del océano Atlántico.

Los actos de recordación al pie de la tarja conmemorativa elevada a orillas de la costa en La Puntilla del malecón puertoplateño, donde están incrustados los nombres de los 176 pasajeros y 13 tripulantes del fallido vuelo 301 de la aerolínea, comenzaron con la invocación a Dios por parte del obispo de Puerto Plata, monseñor Julio César Corniel Amaro.

La aeronave que antes de su despegue estuvo estacionada 21 días en el aeropuerto de la ciudad, estalló en la planicie marina el 6 de febrero de 1996, poco antes de la medianoche, esfumando toda esperanza de vida.

El embajador alemán en el país, Volker Pellet, resaltó que la conmemorada, es la peor catástrofe aérea que hayan sufrido la aviación civil alemana y dominicana.

Dijo que el acontecimiento apagó la vida de personas que “tenían sueños, y planes y cuyas vidas terminaron en un terrible accidente”.

“Recordamos el triste impacto del destino de la tripulación turca y de las azafatas dominicanas que se hicieron cargo de este vuelo con muy poca antelación”, dijo.

Expresó su agradecimiento a las autoridades dominicanas, al Servicio de Guardacostas de los Estados Unidos, y al sector privado y de pescadores de la ciudad, que acudieron a prestar auxilio.

El director del Instituto Dominicano de Aviación Civil, Román E. Caamaño, expresó en nombre de la institución, sus sentidas condolencias a los familiares de las víctimas de una tragedia que le sumó experiencias a la aviación civil dominicana, porque permitió la ejecución de mejores prácticas y operaciones de vuelo, que se corrigieran errores y se reforzaron las estrategias.

“Actualmente el Instituto Dominicano de Aviación Civil ha desarrollado una estructura de vigilancia de la seguridad operacional robusta y apegada a los estándares de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), así como su capacidad de búsqueda y rescate (SAR), para mitigar el riesgo de cualquier evento siniestro aéreo”, indicó.

Los cuerpos de 121 de las víctimas quedaron sepultados en las profundidades del océano, ya que solo 68 fueron recuperados y entregados a sus familiares.

De los 13 tripulantes, 11 eran turcos, dos azafatas dominicanas y 9 pasajeros eran polacos.

Alrededor de la tarja, se depositaron este sábado ofrendas florales de parte de la Embajada Alemana, la Embajada de Turquía y los presentes.

El que para entonces fuera el encargado de la Comisión de Accidentes de la Dirección General de Aeronáutica Civil, hoy IDAC, general de brigada de la Fuerza Aérea, Enmanuel M. Souffront Tamayo, recuerda que la tragedia estuvo marcada por una serie de errores y fallas sucesivas a las que no se le prestó atención y que dieron al traste con el accidente.

Encargado de la investigación del evento, narró que tras recuperar las cajas negras de la aeronave se pudieron obtener datos de las conversaciones durante el proceso del accidente, se descifraron estas conversaciones y se recreó el accidente con un simulador de vuelo.

La investigación final reveló que hubo un bloqueo en las entradas de los tubos pitot, ya que la aeronave estuvo estacionada durante 21 días, provocando que los tubos, que son esenciales para medir la velocidad, no estuvieran cubiertos adecuadamente.

Tampoco se cumplió con el procedimiento de mantenimiento necesario, al retornar la nave al servicio.

La cadena de eventos que continuó con las fallas en la indicación de velocidad, sumada a que el capitán Ahmet Erdem, ignoró las fallas que se emitían, acumuló razones para la tragedia.

Erdem, era un piloto experimentado, con más de 30 mil horas de vuelo.

En el evento, donde una representación de la banda de música de la Base Aérea de Puerto Plata, entonó los himnos dominicano y alemán, estuvo presente la gobernadora Claritza Rochtte de Senior, el alcalde del municipio Diómedes Roque García; Stephanie Kfouri, la directora de Turismo regional Norte y en Puerto Plata, entre otras autoridades.