Más de 15 mil bebés prematuros han salvado sus vidas
En República Dominicana, las tasas de mortalidad materna y neonatal continúan siendo preocupantes, en comparación con otros países de las Américas.
De acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que cada año nacen en el mundo unos 15 millones de niños prematuros (antes de que se cumplan las 37 semanas de gestación) y esta cifra está aumentando.
Para el año 2018, se registra que 2,830 bebés y 200 mujeres dominicanas murieron durante el embarazo y después del parto.
En 2020, alrededor de nueve mil bebés nacieron prematuros en el país y 14 mil con bajo peso, lo que deriva, según especialistas del área, en una serie de complicaciones de salud.
Las complicaciones relacionadas con la prematuridad son la principal causa de defunción en los niños menores de cinco años. Se estima que alrededor del mundo, cada año mueren 2.8 millones de embarazadas y recién nacidos, esto es, 1 cada 11 segundos, la mayoría por causas prevenibles.
La doctora Angélica Florén, a través de la Fundación Dominicana para la Madre y el Niño (Dofmi por sus siglas en inglés), con sede en Miami, Estados Unidos, presidida por ella y con Elena Viyella de Paliza como miembro de la directiva, ofrece programas de atención de bajo costo y alto impacto, tales como Mamá Canguro, Cuidado Respiratorio en el Recién Nacido, Hiperbilirrubinemia, Retinopatía del Prematuro, Cafeína Oral para mejorar la condición respiratoria del bebé y programas de educación y entrenamiento a enfermeras y madres.
Su misión es disminuir la mortalidad materna y neonatal creando estos programas de cuidado neonatal y de cuidado de embarazos de alto riesgo materno.
“La magnitud del problema es relevante tomando en cuenta que demasiadas mujeres mueren en el mundo en el período previo y posterior al parto a causa de hemorragias, hipertensión e infecciones, problemas fácilmente tratables en un centro asistencial moderno, pero también sus hijos fallecen con ellas o durante su primera semana de vida”, señaló Florén.
El conocimiento adecuado del protocolo médico, la calidad de los servicios y del personal médico aunado a enfermeras calificadas, además de agua salubre, una nutrición adecuada, así como los medicamentos y vacunas básicas pueden suponer la diferencia entre la vida y la muerte de las madres y recién nacidos durante el parto y los primeros 28 días de vida del bebé.
Desde Dofmi, hacen el llamado de atención para mejorar la calidad de los servicios de los hospitales en el área materna y neonatal, ya que, de acuerdo a su experiencia, más del 95 % de la atención preparto, parto y neonatal debe ser ejercida por personal de salud calificado.
15 mil niños salvados
Los esfuerzos aunados de más de 50 voluntarios y la experiencia de cerca de tres décadas de la doctora Florén, con programas de bajo costo y alto impacto, han contribuido a salvar más de 15 mil niños en diferentes hospitales públicos.
Los programas de atención de Dofmi son ejecutados en los diversos centros hospitalarios del país, entre los que figuran el Hospital Materno Infantil San Lorenzo de Los Mina; Hospital Pediátrico Robert Reid Cabral; Hospital Universitario Maternidad Nuestra Señora de la Altagracia; y el Hospital Regional Dr. Antonio Musa en San Pedro de Macorís, entre otros.
Cobertura sanitaria preventiva
De su lado, Elena Viyella de Paliza destacó la importancia del Plan Estratégico Nacional de Salud (Plandes) que se está estructurando para el período 2022-2030 por el presidente Luis Abinader, el cual constituye una valiosa oportunidad para que el sistema de salud logre mejorar la atención prenatal y neonatal con la finalidad de disminuir las muertes maternas y neonatales.
“La realidad es que a mayor y más efectiva inversión en la cobertura sanitaria preventiva con el objetivo de que las tasas de mortalidad materna y neonatal en República Dominicana reduzcan la curva alcista que desde hace años vienen exhibiendo, mejores condiciones y probabilidades de vida tendremos para nuestras madres y bebés”, comentó.
Viyella de Paliza precisó que la visión es ir “ajustándonos a las aspiraciones de la meta 3.1 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de reducir para 2030 la razón de mortalidad materna mundial a menos de 70 por cada 100 mil niños nacidos vivos”.
Entre los planes de Dofmi para 2022 está el implementar programas de ayuda a Haití, ya que un alto número de las cifras de fallecimiento en embarazadas y recién nacidos, vienen de madres que emigran al país, que “no acuden a los hospitales a tiempo por desconocimiento o razones económicas”.
También destacaron el déficit de enfermeras que se observa en los hospitales locales y la necesidad de incorporar más al sector privado dentro de las acciones que desarrollan.