Bruselas propone un plan de reconstrucción de Ucrania para acelerar su integración con la UE
La Comisión Europea ha anunciado este miércoles que incrementará en 9.000 millones de euros la asistencia macrofinanciera para el funcionamiento del Estado ucranio. Pero el Ejecutivo presidido por Ursula von der Leyen ya no se conforma con la ayuda de emergencia y ha propuesto reservar parte del presupuesto comunitario para la reconstrucción de un país devastado por la invasión rusa. El organismo comunitario defiende también que la UE debe liderar la ayuda internacional y asumir gran parte de una factura que cifra ya en cientos de miles de millones de euros.
El objetivo de la Comisión es que la reconstrucción se oriente desde el principio hacia la integración del país con la Unión Europea. Y Bruselas prefiere iniciar cuanto antes el esfuerzo, sin esperar al final de la guerra, porque “quizá nunca llegue el día en que los invasores rusos permitan a Ucrania tener una paz limpia”, ha dicho el vicepresidente económico de la Comisión, Valdis Dombrovskis.
El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha anunciado, además, que en la cumbre europea de junio se abordará la revisión del proceso de ampliación, con la intención de permitir adhesiones parciales y reversibles. La cumbre debatirá también la idea del presidente francés, Emmanuel Macron, de crear una confederación que aglutine tanto a los socios de la Unión como a todos los países del entorno que compartan los mismos valores y principios.
Michel secunda la idea de Macron porque, a su juicio, “existe una comunidad geopolítica que se extiende desde Reikiavik hasta Bakú o Ereván, desde Oslo a Ankara…”. Y el presidente del Consejo propone dotar a ese territorio de una estructura política que denomina comunidad geopolítica europea. En ese espacio se encuentra Ucrania, país que ha pedido el ingreso en la Unión, aunque todas las fuentes coinciden en que necesitará años para lograrlo.
El plan sobre Ucrania aprobado este miércoles por la Comisión aboga por apuntalar la reconstrucción sobre cuatro pilares que coloquen al país en la senda de la Unión: la reconstrucción de las infraestructuras civiles y la adaptación de las redes eléctricas y digitales a los estándares europeos; la modernización de la Administración y su alineamiento con un Estado de derecho; la aplicación de una agenda regulatoria que profundice la integración de Ucrania con la UE; y el apoyo para la recuperación económica y social del país.
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Para financiar tan ingente esfuerzo, la Comisión propone crear una plataforma de apoyo internacional, liderada por el Gobierno ucranio y el organismo comunitario. Y canalizar la ayuda de la UE a través de un instrumento bautizado como RebuildUkraine (reconstruir ucrania), integrado en el presupuesto de la UE y destinado a financiar subvenciones y préstamos.
El funcionamiento de esa partida sería similar al del Fondo de Recuperación creado a raíz de la pandemia para ayudar a los socios de la UE, de modo que la ayuda se concedería a cambio de reformas e inversiones. “Nuestra idea es ayudar a Ucrania a crear las bases de un país libre, democrático y próspero”, ha señalado Dombrovskis durante la presentación del documento en rueda de prensa.
Bruselas no pone aún una cifra exacta al coste de reconstruir el primer país europeo que se ha visto invadido por un vecino desde la II Guerra Mundial. Pero calcula que “el daño conjunto estimado ya alcanza los cientos de miles de millones de euros, con más de 100.000 millones solo en daños a infraestructuras”. La Comisión cree que dada la magnitud del daño causado por la guerra hasta ahora, “el esfuerzo de reconstrucción cubriría potencialmente más de una década”.
El Ejecutivo de Von der Leyen quiere asumir el liderazgo de la imprescindible ayuda internacional para garantizar que Ucrania sale de la guerra con una agenda de recuperación y reforma claramente orientada a su integración con la Unión Europea. “Dado que esta guerra se está librando en las fronteras de Europa, la UE está dispuesta a liderar el esfuerzo internacional junto a la propia Ucrania y proporcionar una parte importante de la financiación”, ha señalado Dombrovskis.
La Comisión asegura que las ayudas concedidas desde hace años a Ucrania, en particular desde la invasión rusa de Crimea en 2014, ya habían dado resultado en la modernización del país. En siete años, Kiev recibió casi 8.000 millones de euros del presupuesto comunitario entre préstamos de asistencia macrofinanciera (que fue el grueso), subvenciones o ayuda humanitaria.
La inyección de recursos se aceleró a partir del pasado 24 de febrero, con la invasión rusa. Y desde entonces, el Gobierno de Volodímir Zelenski ha recibido de la UE 4.100 millones de euros, a los que Bruselas quiere añadir 9.000 millones a lo largo de este año. El apoyo militar desde las arcas públicas ha sido de 1.500 millones, con otros 500 millones a punto de aprobarse.
Pero Bruselas advierte de que las ayudas a partir de ahora, y en la posguerra, adquirirán otra dimensión, hasta el punto de que será necesario, con toda probabilidad, buscar fórmulas de financiación más allá del presupuesto comunitario. La Comisión sugiere contribuciones adicionales de los Estados miembros y de países terceros que quieran colaborar o, incluso, emisiones conjuntas de deuda como las del fondo de recuperación o avaladas por los Estados.
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