Soprano rusa Anna Netrebko no actuará en La Scala
La soprano rusa Anna Netrebko ha anunciado que no acudirá al teatro La Scala de Milán, donde tenía previsto algunas actuaciones en los próximos días, sin dar explicación alguna por su ausencia y después de que la ópera milanesa prescindiese del director ruso Valeri Guérguiev por no condenar la invasión de Ucrania.
Netrebko respondió este lunes en sus redes sociales a un artículo del diario italiano «La Repubblica» en el que se aseguraba que no acudirá a La Scala por problemas de salud. «Estoy muy bien, pero no vengo», escribió sin más.
La soprano tenía que llegar a Milán en los próximos días junto con su marido, el tenor Yusif Eyvazov, para interpretar la Adriana Lecouvreur de Francesco Cilea a partir del 9 de marzo en el templo milanés de la música lírica.
La soprano, residente en Estados Unidos, había manifestado su posición contraria a la guerra en Ucrania, pero también lamentó que se obligue a los artistas a exponer sus opiniones políticas.
«Me opongo a esta guerra. Soy rusa y amo a mi país, pero tengo muchos amigos en Ucrania y el dolor y el sufrimiento en este momento me rompen el corazón. Quiero que termine esta guerra y que la gente pueda vivir en paz. Esto es lo que espero y rezo», publicó en redes.
Pero lamentó que se tenga que «obligar a los artistas o cualquier figura pública a expresar sus opiniones políticas y denunciar que su patria no actúa bien».
«Esto debería ser una elección libre. Como muchos de mis colegas, no soy una personalidad política ni una experta», zanjó.
Mientras, La Scala ha prescindido de Guérguiev, amigo personal del presidente ruso Vladimir Putin y que debía ofrecer varios conciertos hasta el 15 de marzo, debido a que no ha condenado la invasión de Ucrania por parte de Rusia como se le había pedido.
«No creo que vuelva, ahora mismo creo que podemos excluirlo», explicó a los medios el alcalde de Milán, Giuseppe Sala, presidente también del Consejo de Administración del famoso teatro lírico.
Pese a todo, este fin de semana el «Bel canto» ofreció una imagen de paz y reconciliación, cuando al término de una «Aida» en el San Carlo de Nápoles (sur), la ópera más antigua de Europa, la soprano ucraniana Liudmyla Monastyrska y la mezzosprano rusa Ekaterina Gubanova se abrazaron, entre los aplausos de los asistentes.