¿Por qué dejar fuera a la República Dominicana de las sedes de la Serie del Caribe?
Por primera vez desde que trabajo en la crónica, y en octubre se cumplen 24 años de eso, la República Dominicana es sede de una Serie del Caribe y la misma luce exitosa.
Sin embargo, la del 2022 podría ser la última Serie del Caribe que se celebre en el país en casi una década, de acuerdo al calendario presentado el sábado por el comisionado del Caribe, Juan Francisco Puello Herrera.
Honestamente, no entiendo la razón para la que se pondere a la ciudad de Miami, en el Loan Depot Park, con dos versiones (2024 oficial y 2028 potencial) así como dos sedes para México (Mexicali 2025 y Hermosillo 2027) sin incluir de nuevo en la parrilla a una sede quisqueyana.
El comisionado Puello Herrera asegura que esta alineación fue aprobada unánimemente en el seno de la Confederación, pero una persona con conocimiento del asunto le dijo a Diario Libre que la historia no es exactamente así.
De hecho, el acuerdo para la sede de Miami -aunque fue anunciado hace semanas por el comisionado Puello Herrera tanto a Enrique Rojas, de ESPN Deportes, como a Nathanael Pérez, de este diario- tenía algunos detalles jurídicos por limar y la ausencia de varios presidentes de ligas en la rueda de prensa del sábado podría tener algo que ver con eso.
Tras seis años sin ser sede, el público dominicano le ha dado el respaldo esperado al torneo en las primeras dos fechas por lo que la decisión de alejarla por más de seis años nuevamente podría ser un error.
Con las sedes de Venezuela siendo un real asterisco por su situación política que en ocasiones ha chocado con Major League Baseball o con la crisis con la Liga de Puerto Rico, sorprende que la sede dominicana sea relegada de esa manera.
O si hubo algún pacto entre Lidom y la Confederación, pues que se aclare. Pero viendo el éxito de estas dos primeras jornadas, y el manejo del comercializador Adcio Media, no me hace mucho sentido.