Cómo ayudar a los niños a retomar la rutina tras las fiestas navideñas
El regreso a la rutina después de las fiestas navideñas no es fácil para nadie, y mucho menos para los niños. Después de unas cortas vacaciones llenas de celebraciones y libertad, los más pequeños suelen mostrar una resistencia natural a volver a sus horarios y actividades diarias.
Para hacer este proceso más llevadero y menos estresante, te compartimos siete consejos prácticos que te ayudarán a lograr una transición más suave. ¡Toma nota y ponlos en práctica!
1. Establece una rutina gradual en los días previos
Evita hacer cambios abruptos en los horarios de tus hijos. En lugar de esperar hasta el último momento para restablecer las horas de sueño y las rutinas de alimentación, comienza unos días antes de que termine el descanso escolar.
Ajusta progresivamente las horas de acostarse y levantarse para que se adapten a su horario escolar. Esto les ayudará a dormir mejor y a sentir menos el impacto del cambio.
2. Redefine el espacio de estudio de forma divertida
Una forma efectiva de motivar a los niños a regresar a sus rutinas escolares es darle un giro a su espacio de estudio.
Haz que la vuelta al colegio sea algo emocionante decorando o reorganizando su escritorio, añadiendo sus colores favoritos o incluso creando un rincón especial donde puedan sentir que el regreso a la escuela es algo positivo. Involucrarlos en el proceso de decoración puede aumentar su entusiasmo.
3. Mantén conversaciones positivas sobre la vuelta al cole
En lugar de enfocarte en lo negativo del regreso a la rutina, intenta crear un ambiente de optimismo. Habla sobre lo que les espera en la escuela: amigos, actividades divertidas, proyectos interesantes o cualquier aspecto que disfruten del regreso.
Esto les permitirá ver la vuelta a clases como una oportunidad de reencontrarse con lo que les gusta y no como una obligación.
4. Reintroduce las actividades físicas
Durante las fiestas navideñas, es fácil que los niños se vuelvan un poco más sedentarios debido a las vacaciones.
Ayúdalos a volver a la rutina introduciendo actividades físicas diarias. Puedes planificar caminatas familiares, juegos al aire libre o incluso deportes que disfruten. La actividad física no solo les ayudará a liberar energía, sino que también les permitirá dormir mejor, algo esencial para un buen regreso a la rutina.
5. Mantén una alimentación equilibrada
Las fiestas suelen traer consigo un exceso de dulces y alimentos poco saludables. Regresar a una alimentación balanceada es esencial para que los niños tengan la energía y concentración necesarias para afrontar la escuela.
Asegúrate de que su desayuno y almuerzo incluyan alimentos frescos, proteínas, frutas y verduras. Los alimentos nutritivos ayudarán a regular su energía y harán que se sientan más alerta y listos para aprender.
6. Ofrece recompensas pequeñas
El regreso a la rutina puede ser un reto, pero si los niños sienten que hay algo positivo en ello, se motivarán más. Ofrecer pequeñas recompensas por cumplir con sus tareas diarias, como leer un libro, hacer sus tareas o acostarse a tiempo, puede ser una excelente manera de reforzar buenos hábitos.
Recuerda que las recompensas no tienen que ser grandes: una actividad especial o un tiempo extra para jugar puede ser suficiente.
7. Deja espacio para la diversión y el descanso
Aunque es importante regresar a la rutina, también es fundamental permitir que los niños sigan disfrutando de momentos de diversión y descanso.
No se trata de una vuelta a la rutina estricta y poco flexible, sino de encontrar un equilibrio. Permíteles tener tiempo para sus juegos, actividades extracurriculares y descanso, ya que esto les ayudará a no sentirse abrumados por la carga de la rutina escolar.