La policía británica localiza a partir de una foto borrosa a Sheila Fox, desaparecida hace 52 años
Una foto borrosa, en blanco y negro, de una adolescente de 16 años apoyada en un montículo, con la cabeza ladeada y la mirada como perdida. Ha bastado esa mínima pista, localizada recientemente por la policía de West Midlands (la región del centro de Inglaterra), para que las redes sociales hayan demostrado una vez más su capacidad de expansión y búsqueda. Sheila Fox fue vista por última vez en la localidad de Coventry hace 52 años. Era una de los casos de personas desaparecidas más prolongado en la historia del Reino Unido. Más de medio siglo después, la mujer, hoy de 68 años, ha sido localizada en otra zona del país, donde reside apaciblemente desde hace mucho tiempo.
En la época de su desaparición, Fox vivía con sus padres. La policía sospechó que había huido con un hombre, pero mantuvo abiertas en todo momento otras posibilidades. La policía lanzó públicamente la nueva imagen de la mujer el pasado domingo.
“Horas después del llamamiento público [con la nueva foto], algunos ciudadanos contactaron con nosotros aportando información, que condujo a nuestro equipo hacia Fox. Pudimos confirmar que Sheila se encuentra bien y vive en otra parte del país, resolviendo de este modo uno de los casos de desaparecidos más extendido en el tiempo que hemos podido investigar”, asegura el comunicado de la policía que da noticia del hallazgo de la mujer.
El equipo que ha llevado a cabo las pesquisas se denomina Cold Case Team (El Equipo de Casos Enfriados), y dedica sus esfuerzos a revisar y reabrir investigaciones que llevan tiempo paralizadas. Misterios sin resolver cuya complejidad llevó en su momento a la policía a tirar la toalla. Los nuevos avances en las ciencias forenses y, sobre todo, en la tecnología empleada, permiten la resolución de casos que hubieran sido imposibles de concluir con éxito hace algunas décadas.
“Rastreamos cada pista que pudimos encontrar y fuimos capaces de encontrar y de fijar la localización de una foto de Shelia”, ha explicado la sargento detective Jenna Shaw, del equipo investigador. “Cada persona desaparecida tiene su propia historia, y sus familiares y amigos merecen saber lo que les ocurrió. Y si es posible, volver a reunirse con ellos”, ha dicho Shaw.
Tanto la policía británica como los medios que han difundido la noticia han respetado por el momento la intimidad de Fox, y nadie ha difundido su imagen actual, con 68 años de edad.