Corea del Norte enviará más tropas y armamento para apoyar a Rusia contra Ucrania, según alerta Corea del Sur
Corea del Norte se está preparando para intensificar su apoyo a Rusia en su guerra contra Ucrania, según datos en poder de Corea del Sur, que cree que su vecino del norte planea enviar más tropas a Moscú, artillería pesada y, posiblemente, drones kamikazes, una tecnología a la que el líder norcoreano, Kim Jong-un, ha dado prioridad en los últimos meses y que considera esencial en los conflictos modernos por su bajo coste y eficacia. Ello a pesar de que el Estado Mayor Conjunto de Corea del Sur aseguró este lunes que el número total de muertos y heridos en las filas norcoreanas en Ucrania ronda los 1.100, aunque no ha ofrecido un desglose específico. Seúl, Washington y Kiev calculan en alrededor de 12.000 los soldados norcoreanos desplegados en Rusia.
La participación directa del país más hermético del planeta en el combate en suelo europeo y la creciente afinidad de dos regímenes aislados por buena parte de la comunidad internacional inquietan desde Europa hasta la región de Asia-Pacífico. La semana pasada, los servicios de inteligencia de Corea del Sur adelantaron que al menos un centenar de soldados norcoreanos habían fallecido en combate y calcularon la cifra de heridos en hasta un millar. El espionaje surcoreano atribuye estas bajas “al entorno desconocido del campo de batalla, en el que las fuerzas norcoreanas están siendo utilizadas como unidades de asalto desechables, además de a su falta de capacidad para contrarrestar los ataques con drones”, según ha recogido la prensa local. Este lunes, el Estado Mayor Conjunto surcoreano ha elevado enormemente esas estimaciones al señalar: “Las tropas norcoreanas que recientemente han entrado en combate con las fuerzas ucranias han sufrido alrededor de 1.100 bajas”.
El mando militar de Seúl avanzó luego que Corea del Norte “se está preparando para rotar o aumentar el despliegue de tropas [en Rusia]”. Pyongyang ya ha suministrado a los efectivos rusos en Ucrania lanzacohetes múltiples de 240 milímetros y obuses autopropulsados de 170 milímetros, han asegurado los militares surcoreanos, que añaden que “también hay indicios de que se está impulsando la fabricación y el suministro de drones de ataque suicidas”, detalla el comunicado citado por la agencia de noticias Yonhap.
Kim Jong-un pidió el mes pasado acelerar la “producción en masa” de drones de ataque durante la supervisión de una de sus pruebas, notificó entonces la agencia estatal norcoreana KCNA. El líder supremo del país subrayó la importancia de este tipo de armas y “destacó que son cada vez más cruciales en las guerras modernas”, de acuerdo con KCNA. Corea del Norte presentó sus drones kamikazes por primera vez en agosto y, según los servicios de inteligencia surcoreanos, este armamento se ha convertido en una prioridad dentro de su programa de desarrollo armamentístico.
La OTAN ha definido la presencia de soldados de élite norcoreanos en combates con fuego real en Ucrania como “una escalada significativa” de la guerra. Ha sido, además, una demostración de la buena sintonía entre el presidente ruso, Vladímir Putin, y su homólogo norcoreano, con quien firmó en junio un “acuerdo de asociación estratégica” que incluye un pacto de “defensa mutua en caso de agresión”. Dicha alianza entró en vigor a principios de diciembre.
Seúl cree que su vecino del norte se ha involucrado en el conflicto para obtener tecnología punta en el campo balístico y nuclear que le permita modernizar su sistema de armas convencionales, además de para adquirir experiencia real en combate. “Esto podría aumentar la amenaza militar de Pyongyang sobre nosotros”, ha alertado este lunes de nuevo el Estado Mayor Conjunto surcoreano. Los ya de por sí tensos vínculos entre las dos Coreas se han debilitado aún más este año, por lo que Seúl no descarta que, en las próximas semanas, Pyongyang lleve a cabo algún tipo de “provocación militar”.
El Partido de los Trabajadores, que gobierna Corea del Norte con puño de hierro desde 1948, tiene previsto celebrar una reunión plenaria a finales de año, tras la cual el país podría lanzar algunos misiles balísticos. Los servicios de inteligencia surcoreanos advirtieron en octubre de que su vecino ha completado los preparativos para realizar una nueva prueba nuclear —no lleva a cabo ensayos de bomba atómica desde 2017—, y algunos analistas consideran que podría hacerlo antes de la toma de posesión de Donald Trump, el 20 de enero, con el objetivo de aumentar su capacidad de negociación con Estados Unidos.