El autor del atropello de Magdeburgo accedió al mercadillo navideño por una salida de emergencias
Magdeburgo amaneció el sábado de luto. Los habitantes de la ciudad de Sajonia-Anhalt siguen conmocionados por el ataque de un hombre de Arabia Saudí que embistió con su automóvil a gran velocidad a las personas que disfrutaban en esos momentos del principal mercado navideño de la ciudad. Mientras, las autoridades se afanan por llegar al fondo de lo ocurrido e investigan al atacante, detenido minutos después.
El número de víctimas mortales del atropello ascendió de dos a cinco. Se trata de un niño de nueve años y cuatro adultos, informó la Fiscalía, sin querer entrar en más detalles. Además de ellos, 200 personas resultaron heridas. “De ellas, 41 están en estado crítico o muy grave, por lo que no se descarta que aumente la cifra de muertes”, indicó Ronni Krug, representante de la ciudad de Magdeburgo.
Al día siguiente de lo ocurrido, la gran pregunta era cómo fue posible que el hombre accediera al recinto con su vehículo, un BMW negro de gran cilindrada. Tras el atentado islamista perpetrado hace ocho años, cuando un camión embistió un mercado navideño en el centro de Berlín, se revisaron los conceptos de seguridad y se decidió incluir bloques de hormigón para evitar que volviera a suceder. Estos bloques también están en la plaza del mercadillo de Magdeburgo.
“El atacante usó una de las vías de escape y rescate”, explicó Krug. Sin embargo, insistió en que el concepto de seguridad era el “adecuado” y que había sido acordado con todos los organismos de emergencias y seguridad. “En noviembre se endureció tras el ataque en Solingen”, explicó sobre lo sucedido en agosto en el festival de la ciudad de Renania del Norte-Westfalia, en el oeste de Alemania, cuando un islamista acuchilló a varios de los presentes matando a tres personas. “Se trata de un caso que no podíamos esperar, y tal vez no podríamos haber evitado”, añadió.
Ante la continua avalancha de preguntas de los periodistas, Krug destacó la importancia de este tipo de vías de rescate, señaló que había policía apostada en ellas y recordó lo ocurrido en la Loveparade en Duisburgo, en 2010, cuando 21 personas murieron aplastadas en la única vía de salida del recinto. “Se trata de proteger a los visitantes, pero también de que si pasa algo los presentes puedan abandonar rápidamente la zona. Para eso son las vías de escape”, afirmó, al mismo tiempo que adelantó que se analizará todo en profundidad.
Una tragedia en tres minutos
Todo ocurrió muy rápido la tarde del viernes. La policía recibió la primera llamada de emergencia a las 19:02 y el atacante, que recorrió el mercadillo dando volantazos a lo largo de 400 metros para atropellar al máximo de personas, fue detenido a las 19:05. Su detención fue posible rápidamente gracias a que el coche no pudo avanzar mucho posteriormente debido al tráfico que había en esos momentos en la calle a la que se incorporó tras salir de la plaza.
El hombre, identificado como Taleb Al Abdulmohsen, es un médico nacido hace 50 años en Arabia Saudí y exmusulmán. Llegó a Alemania en 2006 y trabajaba en un hospital psiquiátrico en Bernburg, a unos 50 kilómetros de Magdeburgo. En sus redes sociales difundía mensajes críticos con su antigua religión, consideraba a su país de acogida cómplice con el islamismo y criticaba la política de fronteras abiertas de la excanciller alemana Angela Merkel, a la que acusaba de islamizar Europa y para la que pedía la pena de muerte en caso de ser restablecida. También expresaba simpatía por el partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) y por Elon Musk, el magnate propietario de la red X y aliado de Donald Trump.
Sin embargo, a pesar de lo adelantado por algunos medios, que apuntaban a que las autoridades de seguridad alemanas habrían recibido avisos de las autoridades saudíes sobre Taleb Al Abdulmohsen antes del crimen, el jefe de la Policía de Magdeburgo, Tom-Oliver Langhans, negó conocimiento alguno. Asimismo, insistió en que el móvil no está claro aún y tanto Langhans como Horst Nopens, jefe de la Fiscalía de Magdeburgo, se remitieron en todo momento a las investigaciones aún abiertas y pidieron paciencia hasta que se esclarezca todo. No obstante, el fiscal sí citó el descontento con el trato dispensado a los refugiados saudíes en Alemania como posible trasfondo del delito.
“Solo podemos decir con certeza que el autor era evidentemente islamófobo”, declaró por su parte la ministra del Interior, Nancy Faeser, que recordó que todo lo demás es objeto de la investigación y corresponde a las autoridades averiguar qué advertencias se hicieron o no con antelación.
“Es un acto horrible herir a tanta gente con tanta brutalidad”, declaró el canciller alemán, Olaf Scholz, que acudió el sábado a Magdeburgo acompañado de Faeser. El mandatario expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y calificó de “profundamente conmovedora” la solidaridad mostrada por todo el país, al mismo tiempo que recordó la importancia de “permanecer unidos”. “Que el odio no determine nuestra convivencia y que no dejemos que quienes quieren sembrar el odio se salgan con la suya, pero también que actuemos contra los autores con todo el rigor de la ley”, apuntó.
Las reacciones y mensajes de apoyo por lo ocurrido llegaron de todas partes del mundo. Sin embargo, Elon Musk, aprovechó para criticar al Gobierno alemán. “Scholz debería dimitir inmediatamente. Tonto incompetente”, escribió en su red social, X. “Los partidos políticos tradicionales de Alemania han fallado totalmente al pueblo. AfD es la única esperanza para Alemania”, agregó en otro tuit.