Dolor lumbar, una dolencia común
«Es mucho más frecuente de lo que se cree, estadísticamente es la segunda causa de ausentismo laboral y consulta médica.
Se ocasiona debido a múltiples causas, siendo la más común un esfuerzo o movimiento que desencadena el dolor, en muchas ocasiones con tanta intensidad que le impide al paciente realizar movimientos banales; en general este dolor cede con reposo y tratamiento, y los pacientes pueden seguir una vida normal», explica el doctor Ulises Acosta, cirujano de columna, en Spine Center, con quien profundizamos sobre este tema en el marco del Día Mundial de la Columna Vertebral.
Existen otras causas comunes, como la hernia discal, discopatías, espondilolistesis, deformidades, inestabilidad, daño en las facetas, tumores, lisis articular, entre otras, abunda el profesional.
«Un dolor que no ceda a los 2 o 3 días, que se acompañe de dolor en las piernas o ciática, dificultad para controlar esfínteres de la orina o defecación, disfunción eréctil, debilidad, anestesia o alteración de la sensibilidad de la piel, requiere una evaluación inmediata por un especialista, examen médico y estudios de imágenes, para identificar la causa y poder instalar el tratamiento adecuado lo antes posible», agrega el galeno.
La prevención, el enfoque de la medicina moderna
—¿Qué podemos hacer para evitar o mejorar el dolor de la espalda baja?
Iniciemos hablando de la correcta alimentación y control de peso. Desde la bipedestación, estructuralmente, la columna lumbar es la unión de todo el peso de la parte alta del cuerpo con las piernas, un aumento en esa fuerza mecánica vertical puede desencadenar desgastes y dolores.
Se ha demostrado una relación directa entre el cigarrillo y tabaquismo con la deshidratación precoz y acelerada de los discos intervertebrales.
La higiene postural juega un papel fundamental, la carga laboral de los tiempos actuales ha llevado a las personas a someterse a largas horas de trabajo de oficina, sin los requerimientos ergonómicos necesarios.
A esto le sumamos una de las herencias que el COVID-19 nos dejó: el trabajo remoto o «home office», en el que se trabaja desde la cama, frente a una televisión, en la sala, en la cocina, en el piso o en cualquier rincón del hogar sin las condiciones adecuadas.
—¿Qué postura es la recomendada?
La postura de oficina recomendada es una silla con apoyo lumbar, codos apoyados, manteniendo la espalda recta, sin encorvarnos, hombros relajados, rodillas en ángulo de 80 o 90 grados y pies completamente apoyados en el piso.
El monitor debe estar a la altura de los ojos, y sobre todo es bueno ponerse de pie, estirar y caminar algunos pasos por lo menos cada dos horas.
—¿Qué importancia tiene el ejercicio?
El ejercicio y la actividad deportiva son aliados indiscutibles para una buena salud, pero en el caso de la columna debe realizarse con criterios y orientación profesional.
El crossfit, levantamiento de pesas y deportes de impacto sin la supervisión y orientación de un personal capacitado pueden desencadenar o agravar problemas en la columna vertebral.
El dicho popular «la natación es buena para la columna» está lejos de ser un mito y es la pura verdad, cuando nadamos no hay impacto en nuestras vértebras y articulaciones, el cuerpo flota en el agua y al mismo tiempo fortalece toda la musculatura paraespinal.
No quiero terminar este artículo sin hacer énfasis en que la inmensa mayoría de los problemas de columna, no llegan a necesitar cirugía; con terapias y lo mencionado anteriormente se elimina el dolor permitiendo a los pacientes una vida placentera y saludable, siempre bajo la previa evaluación de un profesional capacitado en columna vertebral.