Día Mundial del Corazón: prevenir infartos en diabéticos
En el marco del Día Mundial del Corazón, es fundamental destacar la alarmante relación entre la diabetes tipo 2 (DT2) y el riesgo elevado de enfermedades cardiovasculares (ECV).
Esta conexión, a menudo subestimada, se origina en el daño que los altos niveles de glucosa en sangre provocan en las arterias, acelerando la formación de placas de grasa y aumentando el riesgo de obstrucciones en los vasos sanguíneos.
La Dra. Ileana Chiari-Shan, directora médica de Novo Nordisk CLAT, enfatiza que «la inacción en la prevención y tratamiento de la diabetes y las ECV incrementa significativamente los costos».
Impacto en la salud y las finanzas
La experta estima que los gastos pueden aumentar «en más de un 50% con la aparición de complicaciones cardiovasculares y hasta un 360% tras eventos graves como infartos o una cirugía cardiaca, debido a hospitalizaciones, tratamientos de emergencia y cuidados prolongados».
Este impacto no solo afecta a los pacientes y sus familias, sino que también repercute en la economía global, ya que muchas personas con ECV enfrentan incapacidad laboral, pérdida de productividad y gastos médicos elevados, generando una carga adicional para los sistemas de salud.
Con la prevalencia de la DT2 en aumento, especialmente en países de ingresos bajos y medios, es imperativo intensificar los esfuerzos en prevención y tratamiento.
Por ello, la Federación Mundial del Corazón recomienda tres acciones clave para reducir el riesgo de complicaciones cardiovasculares:
- Controlar la presión arterial: la hipertensión es una de las principales causas de infartos y accidentes cerebrovasculares. Mantener una presión arterial saludable es vital.
- Conocer y gestionar el colesterol: una dieta equilibrada y, si es necesario, medicamentos, pueden ayudar a mantener el colesterol en niveles seguros.
- Monitorear los niveles de glucosa en sangre: mantener estos niveles controlados es esencial para prevenir daños vasculares.
Además, adoptar hábitos de vida saludables, como hacer ejercicio regularmente y evitar el tabaco y el alcohol, complementa estas medidas preventivas.
Mejorar la prevención
El creciente desafío que representa la diabetes tipo 2 exige un enfoque proactivo en la educación y la atención médica, tanto para los pacientes como para los sistemas de salud.
«La lucha contra las enfermedades cardiovasculares en personas con diabetes tipo 2 requiere un enfoque preventivo y proactivo. El control de los factores de riesgo, la adopción de hábitos de vida saludables y el uso de tratamientos innovadores modificadores de la enfermedad pueden salvar millones de vidas», explica la doctora Chiari-Shan.
Al fortalecer estos esfuerzos, no solo mejorará la calidad de vida de quienes viven con DT2, sino que también contribuiremos a la sostenibilidad de nuestras economías.