Paquiao se evitó de un nocaut en los tribunales ante Conor McGregor
Sin subir al ring, Manny Pacquiao le ha dado un golpe como para llevar a la lona a a Conor McGregor.
El boxeador filipino, condenado inicialmente ha pagar casi 8 millones dólares al luchador irlandés, ha visto como su apelación le ha sido favorable y un juez le ha eximido de hacer frente a esta indemnización.
Los hechos se remontan a 2020 cuando Pacquiao firmó un contrato con la promotora Paradigm Sport, que también gestionaba a McGregor, para poner en marcha un combate entre ambos como el que ‘The Notorious’ libró en 2017 con Floyd Mayweather.
Tal combate nunca vio la luz. McGregor perdió con Dustin Poirier en el segundo de sus duelos y se excusó diciendo que se había centrado mucho en el boxeo de cara a su combate con Pacquiao.
Luego, Manny cerró con la promotora Premier Boxing Champions un combate contra Errol Spence y fue demandado por Paradigm, que le reclamaban los 3,3 millones de dólares que le habían pagado por su contrato.
El Tribunal Superior de California, tras el veredicto del jurado, falló que Pacquiao «actuó de mala fe» y le condenó a pagar esos 3,3 millones, más 1,8 millones por daños y perjuicios, además de todos los costes del juicio.
Se trataba, en total, 8 millones de dólares.
«No dejes que esto vuelva a suceder Pacquiao. Me debes 5,1 millones», se burlaba McGregor en sus redes sociales por esta victoria legal.
Pero, este combate iba a tener un segundo asalto. El púgil filipino recurrió la sentencia. Y ahora, el juez Walter P. Schwarm, cual árbitro de boxeo ha levantado al cielo el brazo de Pacquiao.
Manny Pacquiao, al igual que McGregor, lleva desde 2021 sin pelear. Ha negociado este año con Conor Benn o Mario Barrios en el peso welter o Mario Barrios. Pero, mientras, ya peleó en Saitama, en julio, ante el local Rukiya Anpo un duelo ‘amistoso’ y demostró estar muy lejos de su mejor nivel.
McGregor está pendiente de que la UFC le dé una fecha antes de final de año, de las dos que hay ‘libres’ en eventos numerados, para poder así celebrar la pelea que tiene pactada con Michael Chandler, en lo que sería su reaparición cinco años después.
Se trata de un combate pactado para junio y que se tuvo que aplazar por una lesión del irlandés. Dana White, presidente de la UFC, tuvo que improvisar, tirar de agenda e, incluso, llamar a un luchador casi el mismo día para poder ofrecer una cartelera vistosa, digna del UFC 303 que se iba a celebrar. Esa velada dio un nuevo triunfo a Alex Pereira en el Semipesado, la victoria de Diego Lopes ante Dan Ige, la consagración de Roma Dolidze…
Pero también ha pasado factura a un Conor McGregor que ahora ‘llora’ por volver al octógono. White ya señaló hace unas semanas que no sería en 2024, pero luego, el presidente de la UFC ha dado marcha atrás y podría anunciar la pelea para noviembre o diciembre, pese a que no es la primera opción que baraja.