Uno de los náufragos africanos no quería ir en yola
El pasado 6 de agosto, una embarcación a la deriva llegó a las costas de República Dominicana. Unos pescadores de Río San Juan la encontraron y, por su sorpresa, en el interior había cadáveres. Además de eso, había documentos de identidad, celulares y tres paquetes de cocaína.
Uno de esos documentos de identidad tenía el nombre de Yankhoba Tall. Se descubrió que esa embarcación había salido a finales de enero desde Mauritania. Los pasajeros, que querían emigrar hacia Europa, iban en dirección a las Islas Canarias españolas. Sin embargo, perdieron el rumbo. Esos africanos pasaron más de seis meses en el mar. Lo más probable es que murieran de hambre.
Diario Libre, en conversaciones con la periodista de El País Noor Mahtai, investigó y habló con distintos familiares de los fallecidos. Entre ellos, con Abdou Wone, un primo de Yankhoba.
Tal y como informó El País, el primo del fallecido se enteró de que habían encontrado el bote con cadáveres, junto a las cédulas, a través de Facebook. Además, el familiar del fallecido explicó a la periodista Noor Mahtai lo siguiente:
«Recuerdo que un día estábamos viendo un documental sobre la inmigración irregular. Se dio la vuelta y me dijo que nunca, nunca, nunca utilizaría esas barcas improvisadas para llegar a Europa«.
Sin embargo, la vida le llevó por unos caminos que significaron embarcar en un vehículo precario y morir de hambre en el Atlántico. Eso que una vez dijo que no iba a hacer. Quizá fue la desesperación por querer una vida mejor, la impaciencia o el cansancio. O todo junto. El caso es que Yankhoba estaba casado y tenía dos hijos, uno de tres y el otro de dos años. «Su esposa sigue en estado de shock«.
Ahora, las osamentas encontradas en la embarcación están siendo analizadas por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF). El gobierno senegalés ya fue advertido de este hallazgo. Los familiares de los fallecidos en esa embarcación solicitan que los restos sean devueltos a su país de origen para poder enterrarlos dignamente.