La policía de Bruselas intenta impedir una conferencia ultra con invitados como Orbán y Farage
Las autoridades de Bruselas han tratado de evitar la celebración de una conferencia ultraderechista que tiene anunciada la participación del primer ministro húngaro, Viktor Orbán; el ahora opositor polaco y jefe de Gobierno hasta el pasado diciembre, Mateusz Morawiecki, y el artífice del Brexit, Nigel Farage. La policía ha acudido al mediodía al lugar donde se celebraba el evento y ha ordenado su clausura para evitar desórdenes públicos. Ante la negativa de los organizadores a acatar las órdenes y para evitar disturbios, los agentes han aceptado que la conferencia continúe, aunque impiden la entrada de nuevos participantes. Para los organizadores, la decisión de las autoridades de la capital belga es política y no tiene nada que ver con la posibilidad de que haya desórdenes públicos.
“Emití una orden para prohibir el evento de la conferencia Conservadurismo Nacional para garantizar la seguridad pública”, ha anunciado Emir Kir, alcalde del distrito de Saint-Josse, uno de los que integran la ciudad de Bruselas. Kir, del Partido Socialista, también ha apuntado que “en Etterbeek, Bruselas y Saint-Josse, la extrema derecha no es bienvenida”. Si él enumera tres distritos —uno de ellos se llama como la ciudad— es porque ya antes dos ayuntamientos habían vetado la celebración de la conferencia. De hecho, no ha sido hasta poco después de las 8.00 cuando ha llegado por correo electrónico a los periodistas acreditados la dirección del nuevo lugar donde se iba a celebrar.
J’ai pris un arrêté du Bourgmestre pour interdire l’événement «National Conservatism Conference» pour garantir la sécurité publique.
A Etterbeek, à Bruxelles Ville et à Saint-Josse, l’extrême-droite n’est pas la bienvenue.
— Emir KIR (@emir_kir) April 16, 2024
Alrededor del mediodía, la policía, que había estado rodeando las afueras del hotel donde continuaba la convención —con el británico Nigel Farage en el escenario—, intentó hacer entrega de la orden de cierre y evacuación del recinto. Finalmente, tras rechazar entrar en la sala donde se habían congregado los participantes, decidió retirarse y limitarse a bloquear la entrada, permitiendo salir a quien quisiera —como el propio Farage o, poco antes, el eurodiputado de Vox Hermann Tertsch— abandonar el hotel, sin posibilidad de volver a entrar.
“Los nuevos fascistas son los antifascistas”, denunció el diputado croata Stephen Bartulica, que afirmó durante uno de los paneles que continuaron mientras la policía sellaba las puertas que quienes quieren impedir el acto “enmascaran su cobardía en tolerancia”. Uno de los portavoces de la conferencia rechazó los argumentos del alcalde asegurando que el encuentro es “pacífico” y señaló que la orden aludía a “cuestiones de si hay homófobos o racistas entre la audiencia o en el estrado, suena como cultura de la cancelación, que el alcalde ha tomado una decisión política”.
“Cuando tienes una opinión disidente, a la derecha, conservadora, identitaria, nacionalista, eres tratado así en un país y, desde luego, en una ciudad donde los musulmanes son ya mayoría”, ha denunciado el político del partido flamenco ultranacionalista Vlaams Belang (VB) Filip Dewinter, recientemente señalado por su presunta implicación en un caso de espionaje chino. Según el vicepresidente del Parlamento flamenco, que niega haber recibido dinero de un espía chino expulsado en 2018 de Bélgica, el alcalde que ha ordenado el cierre del evento es un político “islamista, de extrema izquierda” que quiere “intimidar” a los participantes.
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También ha participado en el acto uno de los eurodiputados españoles de Vox. “Ahí estamos viendo la catadura de la mafia de la UE, que cuando ven que se les acaba el chiringuito, nos montan esta operación policial que podría ser en China, en Venezuela o en la España de Sánchez”, ha criticado Hermann Tertsch, quien en los últimos meses de 2023 participó en diversas movilizaciones (manifestaciones, concentraciones y marchas) en Madrid contra la ley de amnistía a los encausados del procés.
La conferencia National Conservatism, en principio, se celebra este martes y miércoles. La organiza la fundación Edmund Burke con la colaboración de otras instituciones ultraconservadoras como la universidad privada húngara Mathias Corvinus Collegium. En el programa están anunciados diversos líderes ultras o políticos conservadores. Solo uno de ellos está ahora en el poder, el primer ministro húngaro, Viktor Orbán. También están invitados el ahora opositor polaco Morawiecki, el excandidato a la presidencia francesa Eric Zemmour y la exministra de Interior británica Suella Braverman, representante ahora del ala más radical de los tories.
Quien no tiene previsto acudir es la primera ministra italiana, Giorgia Meloni. Sí que hay representantes de su partido en la conferencia, pero ella ha eludido participar. Su presencia en un acto de este tipo podría ir contra su pretensión de dar una imagen de líder pragmática y hegemónica en la derecha italiana.
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