El fenómeno Clark impulsa un récord de audiencia del básquet femenino
La revancha de Caitlin Clark (Iowa), la gran sensación del básquet femenino estadounidense, sobre el equipo campeón universitario, Louisiana State de Angel Reese, fue seguida por un récord de 12,3 millones de espectadores, informó este martes la cadena ESPN.
Esta cifra supera la anterior mayor audiencia para un partido de básquet femenino estadounidense que estaba fijada desde 1983, cuando 11,83 millones de personas vieron la final universitaria que enfrentó a USC (Universidad del Sur de California) y Louisiana Tech.
El lunes, los focos del mundo deportivo estadounidense se concentraron en el partido de playoffs universitarios entre Iowa y Louisiana State, que volvían a chocar tras la final del año pasado, monopolizada por el mediático duelo entre Clark y Reese.
Clark, la máxima anotadora – masculina o femenina – de la historia del básquet universitario estadounidense, cumplió con las expectativas con una asombrosa actuación en la que anotó 41 puntos, con 9 triples convertidos de todas las distancias.
Con su triunfo por 94-87, Iowa destronó a Louisiana State y avanzó a la final a cuatro, que culminará el frenético mes de eliminatorias conocido como ‘March Madness’ (La locura de marzo).
Esta espectacular victoria fue también una venganza personal para Caitlin Clark, la escolta de 22 años que se perfila para ser elegida en el primer lugar del próximo Draft de la liga profesional estadounidense (WNBA).
En la final de un año atrás, cuando Louisiana State estaba a segundos de culminar su triunfo, Reese se dirigió a Clark sobre la pista para mostrarle el dedo donde se pensaba poner el anillo de campeona.
Este gesto, que se hizo viral en redes sociales, generó una rivalidad seguida en el último año a nivel nacional y resuelta con el triunfo de Clark frente a la mayor audiencia del básquet femenino.
«Cuando los focos brillan más que nunca, ella da lo mejor de sí», dijo el martes la entrenadora de Iowa, Lisa Bluder, sobre Clark, cuya capacidad para anotar desde cualquier punto de la pista ha sido comparada con la de la estrella NBA Stephen Curry (Warriors).