Pasividad y tránsito
Con un nuevo director en Digesett y con el sustituto de Hugo Beras ya designado como interino al frente del Intrant, es de esperar cambios en las políticas del transporte que vayan encaminados a lograr un tránsito más seguro y ordenado.
El tránsito es uno de los problemas que afectan la vida diaria de los ciudadanos de una manera directa y desestabilizadora del orden público.
¿Es imposible lograr que los motoristas y camioneros respeten las normas de circulación? Se entiende que las políticas para lograr un sistema de transporte público sean diseñadas a largo plazo y que requerirán cuantiosas inversiones. Pero mientras eso llega, el ciudadano, a pie o en su vehículo se enfrenta a más de dos millones de motores, con una cantidad de ellos muy significativa manejando de forma temeraria por aceras, en dirección contraria, irrespetando los semáforos, las intersecciones…
La pasividad de las autoridades ante esta situación ha sido escandalosa. Dos millones de votos, pensarán los políticos. Pero los números de accidentados, de muertos y heridos están ahí para recordarnos cada día que hay que tomar medidas serias.
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