Consejos para visitar museos con niños
El 18 de mayo de cada año se celebra el Día Internacional de los Museos, una fecha constituida con el fin de concienciar sobre la importancia de los museos para el intercambio cultural y el enriquecimiento de las culturas. Mientras más temprano se empieza a inculcar el amor por el arte, la ciencia y la historia, mejor. Por eso, aprovechamos la fecha para compartir cinco consejos para visitar museos en familia y hacer de la experiencia una agradable para todos.
Háblales antes de ir
Lo primero que debes hacer es hablar con tus hijos antes de la visita sobre lo que podrán ver allí y cómo deben comportarse. Trata de que entiendan que es un lugar en el que deben guardar silencio, no pueden correr por las salas ni tocar las exposiciones.
Visitas cortas
Exigirle a un niño que guarde silencio o se mantenga tranquilo por mucho tiempo es casi como pedirle peras al olmo. Por eso, lo ideal es que las visitas sean cortas (de aproximadamente 45 minutos). En caso de que se trate de niños inquietos, opta por llevarlos a museos al aire libre o más flexibles en cuanto a comportamiento.
Elige bien la temática
No todos los museos son adecuados para niños, pues a pesar de que sean muy interesantes, para ellos pueden ser simplemente aburridos. Antes de elegir la exposición que visitarán piensa en los gustos de tus hijos y lo que están aprendiendo en el colegio para que sea una experiencia divertida. Una buena idea es escoger museos interactivos, donde puedan tocar, escuchar y experimentar.
Si son muy pequeños, lleva coche
En caso de que sean menores de tres años, lleva coche o ve dispuesto a cargarlos en brazos. Es normal que los niños se cansen mucho más rápido que los adultos; cuando eso pase es importante que no reacciones de mala manera. Tomen un pequeño descanso para luego continuar con el recorrido.
Responde sus dudas
Los niños son muy curiosos por lo que en visitas a museos es casi seguro que surgirán muchas preguntas. Ve preparado para ello, responde todas las dudas que puedas y cuando no tengas respuestas a sus preguntas, sé sincero y diles que no sabes. Una vez lleguen a casa, busquen respuestas a las dudas que hayan surgido durante la visita.