Conoce los beneficios de no hacer dieta
Dieta no siempre es sinónimo de estar saludable. Si bien es cierto que el término hace referencia a un estilo y conducta de vida saludable, con el tiempo se ha distorsionado, asociándolo incluso a prácticas que atentan contra la salud de las personas.
Precisamente para recordar los riesgos que suponen algunos regímenes alimenticios exagerados es que se ha establecido el Día Mundial Sin Dietas, que se celebra el seis de mayo de cada año. El origen de esta celebración se remonta a 1992, cuando la feminista británica Mary Evans Young decidió emprender una lucha en contra de las empresas encargadas de promocionar el consumo de productos dietéticos.
A propósito de la fecha, listamos algunos de los principales beneficios que supone comer balanceado siempre, en lugar de hacer dietas:
Mejora el estado de ánimo
No es casualidad que cuando se está en un régimen alimenticio estricto cambie el estado de ánimo, por lo general para mal. Tal y como explica el doctor José Luis Sambeat, médico experto en diagnóstico y tratamiento de la obesidad, al portal Mujer Hoy, las dietas restrictivas e hipocalóricas bajan el ánimo. A eso también se le añade la ansiedad de no saber cuándo acabará el régimen alimenticio.
Aumenta la motivación
Uno de los grandes problemas a los que se enfrentan las personas que hacen dieta es la desmotivación, por someterse a regímenes alimenticios muy estrictos y no ver los resultados deseados a corto plazo. Cuando en lugar de hacer dieta optas por elegir los alimentos correctos, combinarlos con cabeza y comer las porciones adecuadas, aumenta tu motivación, pues logras bajar de peso sin tener que renunciar por completo a lo que te gusta.
No hay efecto rebote
Las dietas, sobre todo las que permiten perder peso de forma rápida, suelen tener un efecto rebote. El 95 % de las personas que se someten a una recuperan su peso o incluso ganan más del que ya tenían. ¿Por qué ocurre este efecto? Por tres factores de suma importancia: pérdida de masa muscular, disminución en la síntesis de hormonas tiroideas, incurrir en excesos de carbohidratos y grasas tras la dieta.
Cabello más sano
Un régimen alimenticio que carece de elementos esenciales como proteínas, hierro, zinc o vitaminas B y D puede conducir a deficiencias nutricionales y, en consecuencia, afectar el crecimiento del cabello y su apariencia. “En las dietas estrictas lo que puede ocurrir es que a partir de los tres o cuatro meses de haberla iniciado haya una caída brusca y alarmante del cabello, que se puede mantener en el tiempo si no se corrige la causa que lo ha producido, en este caso la dieta y la falta de determinados alimentos y vitaminas y minerales”, explica la dermatóloga Cristina Serrano para una publicación en Webconsultas.
Mejora el funcionamiento del cerebro
El cerebro puede consumir unas 350 calorías en 24 horas. Cuando las personas se restringen de calorías, que es lo que sucede con la mayoría de los planes de alimentación para perder peso, también lo hacen de energía necesaria para el funcionamiento óptimo del cerebro y del cuerpo en general.
Protege la salud cardiovascular
Las dietas que se basan en comer carne, huevo y otros alimentos hiperprotéicos, que no incluyen alimentos ricos en hidratos de carbono, tienden a ser riesgosas para las personas con enfermedades cardiacas. Esto, porque originan la pérdida de masa ósea, daños renales, fatiga y mareos, además de favorecer la deshidratación y el aumento del colesterol y triglicéridos.
Es importante aclarar que hacer dieta no es malo, siempre y cuando se escoja una que se ajuste a las necesidades específicas de nuestro cuerpo. Una dieta correcta en un plan de adelgazamiento debe ser personalizada y estar bajo la prescripción y supervisión del profesional especialista. “Es aquella que cumple con los requisitos de ser equilibrada, variada y moderada y que hace posible el mantenimiento de un óptimo estado de salud, aportando menor energía de la que gastamos”, explica la Fundación Española de la Nutrición (FEN) en un comunicado.
¿De cuáles dietas debes mantenerte alejado? de aquellas que prometan bajar de peso de forma rápida, conocidas como dietas milagro. Estas, según el doctor Juan Madrid Conesa, especialista en endocrinología, se caracterizan por hacer daño a la salud física y psicológica ya que, tras hacerlas, se vuelve a engordar, lo que deja una gran sensación de fracaso y frustración. El médico señala que una pérdida de peso saludable implica perder como máximo tres o cuatro kilos al mes.