Cómo dar retroalimentación en las empresas
En los últimos años, la retroalimentación o feedback se ha convertido en una herramienta indispensable para el buen funcionamiento de las empresas. Se trata de un proceso de comunicación que se desarrolla entre un jefe y sus colaboradores en el que se exponen diferentes puntos de vista a fin de garantizar la mejora continua.
De acuerdo con la experta en gestión estratégica del capital humano y en bienestar organizacional Luisa Bernhardt, hacer parte de conversaciones de feedback en el ámbito laboral tiene importantes beneficios para las empresas, entre los cuales cita clarificar las metas, los objetivos, los roles y las responsabilidades, construir un plan de acción que ayude a lograr nuevos resultados y eliminar obstáculos.
Asimismo, destaca que es de beneficio para los empleados, ya que es una oportunidad para consolidar la confianza en las capacidades propias, ampliar el nivel de conciencia sobre los retos y oportunidades, así como interiorizar cuál es la contribución que cada uno debe hacer al equipo u organización.
¿Cómo realizar una retroalimentación laboral? La experta comparte las claves para hacerlo de manera exitosa.
Define un período de tiempo de evaluación
Establece una fecha o un rango de tiempo que cubre el feedback y hazlo saber a quienes asistirán a la sesión para que tengan un marco de tiempo de referencia. Por ejemplo, los últimos seis meses, el último mes, el tiempo ocupando un rol en un proyecto específico, etc.
Elige un buen momento
Busca el mejor tiempo en tu agenda para evitar reuniones de último momento o tareas que impliquen aplazar la sesión de feedback. Las personas aprecian el tiempo que tú inviertes en ellas. Prepara información: recopila datos, hechos y fechas que indiquen la acción que deseas reconocer o la temática de mejoramiento que recomendarás a tu colaborador.
Enmarca la sesión
Es vital que des un marco y objetivo a la sesión de trabajo y lo comuniques a tu colaborador o invitado. Por ejemplo, “el objetivo de la sesión es conversar acerca de tu desempeño durante los últimos dos meses y hablar sobre la forma en la que estás desempeñando tu rol en el proyecto”.
Mantén una actitud adecuada
Sé genuino, neutral y no uses comportamientos prefabricados que alejen a las personas. Esto facilita sostener una conversación abierta para analizar libremente y sin prejuicios los diferentes puntos de vista. Sé empático: la empatía implica una apertura personal sin precedentes, te permite reconocer y sintonizarte con los sentimientos, necesidades, preocupaciones o desafíos de la otra persona, para entender cómo le afectan.
Escucha y pregunta
La retroalimentación es una calle de doble vía. Escucha atentamente los puntos de vista de tu invitado o colaborador y realiza preguntas para profundizar y entender los puntos de vista. Realizar una buena indagación permite no asumir acciones o comportamientos de la otra persona.
«El feedback es un proceso activo y constante, donde tomas la información que recibes y ejerces acción con ella para llevar al sistema o a las personas a un nuevo nivel o estado»experta en bienestar organizacional
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