Día de la Mujer con pocas mujeres en dirección deportiva
La primera ocasión ocurrió el 28 de febrero de 1909, cuando se celebra por primera vez en Estados Unidos el “Día Nacional de la Mujer”. Un grupo de decididas mujeres fueron las responsables de ese hecho organizado por el Partido Socialista de los Estados Unidos, a sugerencia de la activista Theresa Malkiel.
Esa decisión, aparentemente, es lo que ha faltado en la mujer dominicana en términos dirigenciales. Hubo un gran salto en el mundo competitivo a favor de la mujer cuando el COI aprobó en febrero de 2018 buscar una mayor igualdad de género en Juegos Olímpicos, tendente a que sea 50% hombres y 50% mujeres. En Tokio 2020 fue 48 por ciento.
Es incuestionable el aporte de la mujer al deporte dominicano en términos competitivos. Basta ver Tokio 2020. A nivel de la dirigencia deportiva, entonces el túnel se estrecha.
Existen casos excepcionales como el de Norma Díaz, reconocida como la primera mujer en fundar una liga de béisbol, hecho ocurrido el 30 de abril de 1969. Funciona en Los Mina. Y no se ha detenido.
Otra academia de un deporte es la que lleva Teresa Durán, con su liga de baloncesto; Dulce Piña, con su escuela de judo, Zobeida Uribe, con su escuela de iniciación de atletismo y así se conocen algunos casos esparcidos de mujeres, las mucho menos, que presiden clubes deportivos.
Pero no pasa de ahí. Un levantamiento de los diferentes comités ejecutivos de las distintas federaciones y asociaciones deportivas, incluido el Comité Olímpico Dominicano dejaría resultados poco atractivos sobre la participación de la mujer en la dirección en altos niveles.
El debate gira en torno a si se trata de falta de oportunidades, o falta de interés, basado en una interrogante ¿Por qué se van?
Un congreso
Niurka Herrera, una exselección nacional femenina de baloncesto está preocupada por la baja participación de las damas en la dirección deportiva.
Es por eso que, Herrera, Coordinadora de la Unidad de Género del Ministerio de Deportes, ha propuesto y está a espera de aprobación realizar “un congreso o encuentro con mujeres de las diferentes federaciones para tratar el tema “Mujeres en el negocio del deporte”, porque muchas de esas mujeres piensan que su vida en el deporte termina como atleta”.
Eso es lo que ella quiere trabajar.
La exjudoca, Leidi Germán, también suma al tema al sugerir que la mujer debe darse cuenta de los valores que puede sumar al deporte. “Nosotras las mujeres-atletas debemos valorar todo el esfuerzo y entrega que dedicamos por cinco siete u ocho años sembrando, donde esas que se van no pueden cosechar el esfuerzo que ellas hacen”, dijo Germán, quien es la primera mujer dominicana con una medalla de judo en una Copa del Mundo.
Es lo que observa Herrera. Ambas en la misma página. “No visualizan que cuando te retiras como atleta puedes quedarte en el negocio, porque el deporte es un negocio y que tú puedes igual que los hombres vivir del deporte”, señaló la también presidenta de las Indias del Sur, en la Liga Nacional de Baloncesto Femenino.
El caso de Germán, es un caso especial. Ella se retiró y siguió con funciones en el deporte. Es la primera mujer, directora técnica de la Federación Dominicana de Judo, un puesto que en este país siempre fue desempañado por hombres. “Si las mujeres atletas siguieran el camino deportivo de ser dirigente, árbitros, etc, le suman al deporte. Esa vocación de ser madre, de enseñar, lo dedicamos en todos los ámbitos que podemos dirigir”, señala Germán.
Y el ser madre, señala Herrera, es lo que a veces lleva a la mujer a retirarse de manera total, porque en la “sociedad mundial” está dedicada “a cuidado” de la casa o de la familia.
Crismery Santana es la primera mujer en ganar una medalla individual en Juegos Olímpicos y Marileidy Paulino la primera en subir a un podio olímpico, ambas lograron esa hazaña en los pasados Juegos de Tokio 2020. Felicia Candelario fue la primera en ir a unas Olimpíadas, en Montreal 1976.