La precaria situación que pasan estudiantes en El Seibo
Estudiantes del Centro Educativo Alberto Berroa de la comunidad El Cuey, provincia de El Seibo, llevan alrededor de 10 años recibiendo docencia en una escuela en construcción. El centro fue derrumbado para ser construido en el 2012 y, desde entonces, la obra ha quedado en un 40 % sin que ningún Gobierno le dé continuidad.
De acuerdo con algunos trabajadores del centro, algunas aulas fueron habilitadas por los maestros, colocando pedazos de zinc viejos llenos de hoyos en algunas ventanas para que los estudiantes no dejen de recibir docencia.
Señalan que los alumnos reciben clases en un plantel con piso de tierra y sin puertas. Los mismos deben a hacer sus necesidades fisiológicas en una letrina, donde acuden casi 200 estudiantes, incluyendo los maestros y el personal de apoyo.
Además, se quejan por que la escuela no cuenta con energía eléctrica, ni con agua, ni cocina y el patio está completamente a la intemperie, donde en ocasiones se llena de animales, por lo que algunos padres se han visto en la obligación de sacar a sus hijos del centro educativo con miedo a que les suceda algo.
La directora del centro educativo, Basílica Martínez, dijo que desde el primer Gobierno, del expresidente Danilo Medina, la escuela fue desbarata para su construcción, dejándola en una obra gris, al tiempo que explicó que desde entonces han acudido a todos lados para que sea terminada “sin que nadie preste atención a dicha situación”.
“Nosotros los maestros, junto con la Asociación de Padres de la comunidad y los estudiantes, como Dios nos ayudó pudimos habilitar el lugar un poco, pero eso no tiene piso, no está empañetada, ni está en las condiciones que debe ser un centro educativo para poder trabajar”, sostuvo.
Martínez manifestó que a pesar de que el plantel no está en las mejores condiciones para dar la docencia, no han dejado de trabajar, puesto que entiende que lo importante es que los estudiantes reciban la docencia.
Sostuvo que el centro educativo sólo cuenta con dos aulas pedagógicas, por lo que manifestó que los estudiantes están “uno arriba del otro” por el poco espacio.
Agregó que están falta de maestros, personal de apoyo y administrativo, por tanto, entiende que el Ministerio de Educación debe de resolver el mal estado de la escuela para que los estudiantes tengan una educación de calidad.
Mientras que, Betania Severino, directora del distrito educativo 12-03, dijo que envió al ministro de Educación, Roberto Fulcar, el reporte de todas esas escuelas que están en malas condiciones.
Precisó que a pesar de esta situación, la directora del centro educativo no ha parado de dar docencia.
Roberto Reyes Mejía, quien imparte docencia en el centro, indicó que una de las aulas se llena de murciélagos. Explicó que la situación pone en peligro la vida de los estudiantes y de la comunidad educativa en general.
«Lo peor es que el patio solo tiene una puerta por donde entramos todos, hasta los animales que a veces se llena también de vacas y caballos. Estamos en peligros todos»Profesor del centro
Explicó que en el espacio del comedor se habilitaron tres grados, la dirección y el departamento de psicología y orientación, por lo que dijo que los niños viven distraídos.
El maestro agregó que la comunidad está demandando una cancha deportiva para que los niños puedan practicar alguna actividad física.
Varios estudiantes del centro educativo hicieron un llamado al presidente Luis Abinader y al ministro de Educación para que le sea terminada la escuela.
Aseguraron que tienen los mismos derechos que los demás estudiantes, por lo que dijeron que «ya basta”, puesto que tienen más de nueve años pasando calamidades a la hora de recibir docencia.
Dijeron que el jefe de Estado “prometió un cambio, pero que por lo visto el cambio no ha llegado”.