Del dicho al hecho hay un gran trecho
El gobernante Partido Revolucionario Moderno (PRM) decidió cambiar sus estatutos y dar paso a la reelección presidencial, un aspecto diferenciador que había asumido como parte de su propuesta política.
La razón principal para semejante cambio de postura ha sido la figura de Luis Abinader como presidente y el hecho de que cuando se prueba el poder, es muy difícil pretender desprenderse de él.
Ese giro del PRM no es anormal ni inesperado. En campaña suena bonito eso de que uno no buscará la reelección, pero lo cierto es que nadie quiere ser presidente por un término y dejar a medias lo que considera su legado de gobierno.
La realidad es que del dicho al hecho hay un gran trecho y al final todos quieren poder reelegirse. Lo censurable es que hagan jugada de engaño en las campañas y no hablen con claridad de las que son sus intenciones desde el principio.
Aquí ningún candidato se va a tirar para gobernar sólo cuatro años, esa es una verdad ineludible. Lo que sí debería ser es que no puedan hacerlo por más de un periodo ni de forma separada, como quieren hacer algunos. Con dos turnos al bate debería ser suficiente para que dejen el camino expedito a los otros.