Danilo recuperó la palabra
La estrategia de Danilo de mantenerse silencioso por meses, todavía no se conoce, y los suyos no aventuraron explicación.
La contraparte también aplicó una estrategia de hacerlo hablar, confesar delitos, y esperaron a que por lo que hizo o por lo que dijera, fuera sometido a la Justicia.
La verdad es que no ha habido hasta ahora juicio de fondo, condena, aunque resulta evidente que un círculo lo cerca, lo acusa, y hace impensable que se escape de la horca o de la cuchilla.
Sin embargo, Danilo recuperó la palabra, volvió al ruedo, y por lo menos cada domingo comparece ante su partido, ante el país, sin ninguna consecuencia ni política ni judicial.
¿Para qué se quería al presidente del PLD en la calle, si la reacción a sus pronunciamientos no altera el orden heredado de las pasadas elecciones?
Danilo no es más ni es menos, y perseguirlo judicialmente o descalificarlo políticamente no tendrá efecto, pues ni aspira ni se postula ni puede presentarse como candidato.
La política del meme solo entretiene o divierte a la parte más insulsa y menos influyente, porque lo menudo no origina ni profundiza debate.
El dominicano es así, la política no cambia.