Conape traslada a un asilo a cuatro envejecientes del Centro de Atención Emaús
La directora de Comunicaciones del Consejo Nacional de la Persona Envejeciente (Conape), Ana Mercy Otáñez, dijo que la responsabilidad de esa entidad se ha cumplido hasta el momento con el caso del Centro de Atención Emaús.
Afirmó que han actuado en base Ley No. 352-98 sobre protección de los adultos mayores, que los rige y que los cuatro adultos mayores que se encontraban en el centro Emaús han sido reubicados en asilos en Santo Domingo.
Otáñez explicó que el proceso siguiente le corresponde al Ministerio de Salud Pública que debe ubicar a las restantes 18 personas.
Argumentó que ellos no tienen una posición definitiva porque es un proceso, pero en la parte que le corresponde a Conape, ya está avanzado al asumir los cuatro adultos mayores que encontraron en el centro.
Una comisión que creó el Conape investigó la administración del Centro de Atención Emaús, en Higüey, que aloja a 21 personas con trastornos mentales, recomendó su cierre y enviar el caso ante el Ministerio Público para que se hagan las indagatorias de lugar en contra de la pastora Belkis Castillo, quien dirige el hogar, por la “situación irregular” e “inhumana” en la que viven los internos.
La directora de Comunicaciones de Conape comentó que procedieron a retirar los adultos mayores en base a un informe que recomienda la comisión porque esas personas que están ahí, no tienen nombre, ni documentos.
“Para nosotros primero está garantizar la vida de los adultos mayores, organizarlos, cuidarlos, higienizarlos y darle medicamentos para entonces introducirlos a un asilo”, aseveró.
Comentó que con un paciente se puede alborotar un asilo completo, pues un solo que no esté en igual cuidado o que no tenga las mismas medidas puede hacerle daño a los que están.
Indicó que los cuatro adultos mayores están ubicados en un asilo en Santo Domingo calificados para atender pacientes en esas condiciones, y que ahí le realizarán los estudios médicos que le correspondan a cada uno para saber su situación.
“El proceso con ellos es un proceso largo, porque no les pueden dar un carnet médico porque no saben ni siquiera como se llaman”, argumentó.