Los talibanes anuncian un alto el fuego de tres días por el fin de Ramadán
La guerrilla talibán ha anunciado este lunes un alto el fuego unilateral de tres días durante el Eid al Fitr, la fiesta que pone fin al mes de ayuno de Ramadán. En Afganistán, el inicio de esa celebración religiosa está prevista el próximo miércoles o jueves a la puesta de sol. La tregua, después de haber intensificado su ofensiva contra las fuerzas de seguridad, supone un respiro temporal para los afganos, pero se queda muy lejos de sus aspiraciones de que insurgentes y Gobierno alcancen un acuerdo que ponga fin a dos décadas de violencia.
El portavoz de la Oficina Política de los talibanes en Doha (Qatar), Mohamed Naeem, ha difundido a través de Twitter el comunicado de los dirigentes del “Emirato Islámico”, como se refieren a Afganistán igual que cuando estuvo bajo su férula entre 1996 y 2001. En él instruyen a sus combatientes que “con el objetivo de que los ciudadanos puedan disfrutar de los tres días del Eid al Fitr en paz y seguridad, (…) cesen todas las operaciones ofensivas contra el enemigo en todo el país”.
No obstante, el texto les indica que se defiendan con todas sus fuerzas “si el enemigo ataca durante esos tres días”. Además, precisa que los combatientes talibanes, a los que se refiere con el término muyahidines, de connotaciones religiosas, “no deben entrar en territorio del enemigo, ni permitir que miembros de este entren en sus zonas”.
La tregua se produce apenas dos días después de uno de los más graves atentados que ha vivido Kabul en meses y que ha multiplicado los llamamientos al alto el fuego. Según el último recuento oficial, del que ha informado un portavoz del vicepresidente segundo, Sarwar Danish, el ataque dejó al menos 85 muertos y 147 heridos, informa Efe. La mayoría de las víctimas son alumnas de la escuela frente a la que estalló el coche bomba. Ningún grupo se ha atribuido la autoría del ataque, del que el Gobierno y los talibanes se responsabilizan mutuamente.
“El anuncio no ha suscitado entusiasmo entre la gente porque es muy temporal, llega en medio de un aumento de los combates por todo el país y tras el sangriento atentado contra la escuela de niñas, realmente una matanza. Los afganos están cansados de esta situación y sólo una tregua de tres días no lo soluciona”, señala Ali Yawar Adili del centro de investigación y análisis político Afghan Analysts Network (AAN). En su opinión, se trata de “una medida táctica” de los talibanes que aprovecha que la violencia decae habitualmente en estas festividades, dan un descanso a sus combatientes y, ante la creciente presión internacional y de los países vecinos, muestran cierta flexibilidad.
Los talibanes ya decretaron un alto el fuego similar en años precedentes con ocasión del fin de Ramadán, que nunca han extendido más allá, y también una oportunista “reducción de la violencia” en la semana que precedió al acuerdo con Estados Unidos para la retirada de sus tropas, en febrero del año pasado. A raíz de aquel, representantes de la guerrilla y del Gobierno de Kabul empezaron a reunirse en Doha para buscar un arreglo político que ponga fin a la lucha armada de los insurgentes para recuperar el poder que les arrebató la intervención norteamericana en 2001.
No ha habido avance desde entonces y el anuncio de la salida de los soldados extranjeros antes de septiembre, ha dejado a los talibanes con la sensación de haber ganado la guerra y sin incentivos para hacer concesiones. De hecho, desde que el pasado 1 de mayo empezó la retirada de las tropas estadounidenses y de los miembros de la misión de la OTAN, la guerrilla ha lanzado una ofensiva simultánea en varias provincias que ha puesto a las fuerzas de seguridad afganas contra las cuerdas.
El Gobierno aún no ha respondido al anuncio talibán, pero obtener un alto el fuego permanente ha sido la obsesión del presidente afgano, Ashraf Ghani, desde que llegó al poder en septiembre de 2014. En todas las ocasiones anteriores, las fuerzas gubernamentales han respetado la tregua. El presidente del Consejo Supremo para la Reconciliación Nacional, Abdullah Abdullah, ha celebrado la decisión de los talibanes, según ha indicado su portavoz, Fraidoon Khwazoon, citado por la agencia Reuters.