América se debate entre la apertura y las restricciones por COVID-19
El aumento de la ola de contagios en algunos países y la sensación de que en unas zonas del continente la pandemia empieza a ser controlada ponen de manifiesto realidades distintas en medio de las medidas de restricción y las de flexibilización, que buscan un paulatino retorno a la normalidad.
Nueva York, por ejemplo, se prepara para levantar este mes la mayoría de las restricciones aplicadas a bares, restaurantes, teatros y museos, que han tenido que funcionar con un aforo limitado en una ciudad que el año pasado fue uno de los principales focos de la pandemia en el mundo.
El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, anunció este lunes que las restricciones se levantarán a lo largo del mes y que el propósito es que a más tardar el 1 de julio la reapertura sea total.
Cuomo dijo que a partir del 19 de mayo se terminarán las restricciones de aforo para la hostelería, tiendas minoristas, gimnasios y peluquerías, aunque los establecimientos tendrán que garantizar que hay espacio suficiente para que los clientes mantengan una separación de cerca de dos metros.
La COVID-19 está en declive en Nueva York
Dentro de las medidas también se prevé la operación del metro las 24 horas, a partir del 17 de mayo, y la autorización para aumentar de 200 a 500 el número de personas que pueden participar en reuniones al aire libre y de 100 a 250 en lugares cerrados. Las nuevas normas serán coordinadas con los vecinos estados de Nueva Jersey y Connecticut.
“La COVID-19 está en declive en la ciudad de Nueva York y en todo el estado y, a medida que cambiamos nuestro enfoque a la reconstrucción de nuestra economía, a ayudar a los negocios y a devolver a la gente al trabajo, es hora de retomar la plena capacidad en el metro”, señaló Cuomo.
Su colega de Florida, Ron DeSantis, revocó este lunes todas las órdenes de emergencia dictadas por las autoridades locales para combatir la pandemia y anunció que firmó un decreto que impedirá que aparezcan nuevas normas que puedan suponer el cierre de negocios y restricciones de la movilización de las personas.
DeSantis dijo que el decreto entrará en vigor el 1 de julio y que fue firmado porque no se justifica que medidas de carácter extraordinario se extiendan cuando en su estado hay “una amplia disponibilidad de vacunas” contra la COVID-19.
El aire de apertura que se respira en Miami se evidenció hoy en un parque de la Pequeña Habana donde antes de la pandemia era habitual que muchas personas se reunieran para jugar dominó. El característico sonido de las fichas sobre las mesas volvió a escucharse después de que ese sitio estuviera cerrado durante más de un año por la pandemia.
“Esto es relajante, muchas personas mayores venimos aquí porque nos aburrimos mucho en la casa. Aquí me entretengo mirando, vienen los turistas y hace fresco”, dijo a Efe el cubano Pablo Hernández, uno de los que acudieron a la reapertura del parque.
Chile mejora pero Argentina y Costa Rica retroceden
Chile, por su parte, empieza a mostrar síntomas de estar saliendo de la segunda ola de contagios, que golpeó ferozmente al país en las últimas semanas, con una reducción de los casos que le permitirá a una buena parte del país salir del confinamiento el próximo jueves.
En el país suramericano se registraron este lunes 4,874 nuevos casos y 98 muertos, mientras que la tasa de positividad nacional (número de contagios por cada 100 pruebas de PCR) descendió al 7.5 %, una de las más bajas de los últimos meses.
Una tasa de positividad inferior al 5 % durante dos semanas seguidas es uno de los criterios epidemiológicos que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS) para dar por controlada la pandemia.
Por el contrario, Argentina entra en una nueva etapa de medidas para frenar la segunda ola de la COVID-19 y evitar el caos sanitario, que incluyen mayores restricciones en especial en el área metropolitana de Buenos Aires, la más afectada por el virus.
El presidente argentino, Alberto Fernández, decretó mantener hasta el 21 de mayo las medidas vigentes desde el pasado 16 de abril, cuya dureza depende del estado epidemiológico de cada sector.
Costa Rica inició hoy una semana de cierre de actividades no esenciales en el centro del país, como medida para desacelerar la tercera ola de contagios, que tiene saturados los hospitales.
La medida, que se extenderá hasta el próximo domingo, afecta a los establecimientos comerciales en las provincias de San José, Alajuela, Cartago y Heredia, que conforman el Gran Área Metropolitana. Los contagios en esa región representan el 68 % de los casos reportados la semana anterior (6,285 de un total de 9,120).
Por su parte, el Gobierno peruano anunció que se mantendrán suspendidos los vuelos comerciales con Reino Unido, Sudáfrica y Brasil hasta por lo menos hasta el 15 de mayo.
En el vecino Ecuador se anunció la prohibición de las exportaciones de oxígeno para asegurar la demanda interna, mientras que el Gobierno de Paraguay dijo que se está investigando la posible vacunación irregular de unas 500 personas en momentos en que en ese país solo se está inoculando al personal de salud y los adultos mayores.
En medio de la controversia por las vacunaciones, la senadora paraguaya Mirta Gusinky, del gobernante Partido Colorado, presentó su “renuncia indeclinable” tras las críticas por haberse vacunado antes de que le tocara a su franja de edad.
América es el continente más golpeado por la pandemia con 1.5 millones de muertes y 62.4 millones de contagios, según la OMS, mientras que Europa registra un poco más de un millón de muertos y 52 millones de casos.
Según la Universidad Johns Hopkins, 3.2 millones de personas han muerto en el mundo y 153 millones resultado contagiadas por la COVID-19. EFE