Tras 17 días de campamento por las tres causales, manifestantes aseguran continuarán su lucha
El campamento que busca que se permita el aborto dentro del Código Penal en tres condiciones específicas, ya cumple 17 días instalado próximo a las oficinas gubernamentales que se ubican frente a la parte trasera del Palacio Nacional dominicano.
Los manifestantes solicitan que se apruebe el aborto en tres condiciones: (1) cuando existe malformación congénita incompatible con la vida de la criatura, (2) cuando la vida de la mujer corre peligro y (3) en casos de incesto o violación.
“Todos los días hemos tenido actividades culturales y educativas. Hoy estamos trabajando en un taller-conferencia “Desmontando Imaginarios Sobre Salud Sexual y Reproductiva”, explicó Tania Hernández, vocera.
Con la presencia de invitados nacionales e internacionales, el campamento se orienta a ejercer presión para que las autoridades aprueben las tres citadas causas en la modificación del Código Penal, el cual está en estudio.
Entre obras de teatro, lectura de poesías y monólogos los organizadores resaltan las “gran cantidad de personas” y organizaciones que se han dado cita al campamento.
“Más de cincuenta organizaciones se han ido sumando. Personas que creen que el Estado debe garantizar derechos tan fundamentales como la vida, salud y dignidad”, refirió Inmagela Abreu, otra de las voceras del grupo.
El campamento, colocado en la intersección de las avenidas México con Delgado, está formado por varias carpas, casitas de acampar, baños móviles, una fuente que les suministra electricidad desde la oficina gubernamental.
Al cuestionarle sobre la visita del politólogo, periodista y escritor argentino, Agustín Laje, quien defiende la penalización del aborto, respondieron que, “estamos en un país democrático y cada persona tiene derecho a opinar y protestar de la manera que quiera”.
“Nosotras y nosotros seguiremos aquí, porque entendemos la necesidad y la urgencia, de que, esas tres excepciones estén en el Código Penal”, indicó Tania Hernández.
Expresó que, uno de los motivos por lo que seguirán allí, es porque cada día escuchan los testimonios de familiares de niñas y jóvenes que han muerto por la prohibición del aborto.