Más de 585 talentos conforman la industria de la música local
La escena musical dominicana ha estado en constante crecimiento. Si bien en los últimos años ha predominado la música urbana, otras fusiones musicales trabajan con fuerza aportando al crecimiento del sector como producto local, además de los establecidos merengue, el típico, la bachata y la salsa.
Una extensa investigación titulada “Mapeo del Ecosistema de la Música Dominicana”, realizada en su mayoría por mujeres del área musical, reúne todo lo que engloba este sector de la economía.
El proyecto, que se publica hoy, fue impulsado por el Centro Cultural de España de Santo Domingo (CCESD) y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo a través de ACERCA, un programa de capacitación para el desarrollo del sector cultural, y se recopiló con la ayuda de músicos, cantantes, promotores, entre otros que aportaron valiosos datos que pueden buscarse en el informe.
En el referido documento que estará en el portal del CCESD participaron profesionales del país, así como de España, Colombia, Puerto Rico, Argentina, Brasil, Francia y Estados Unidos.
Resultados del mapeo
La investigación arrojó que el talento humano artístico asciende a 585, incluyendo a solistas, agrupaciones y productores musicales.
El equipo que trabaja en la producción de eventos ronda las 113 personas, mientras que los sellos y agencias disqueras solo suman 36.
Los que están dentro del género urbano superan las 80 personas, en el merengue 28, en la bachata 21, mientras que en la música alternativa y fusión cerca de 55, y en el rock y metal 52.
En cuanto a los escenarios, que corresponden a lugares como bares, teatros y conciertos identificaron un total de 125.
Asimismo, 53 instituciones educativas se especializan en la formación musical con o sin título universitario, de esa cantidad 34 corresponden a academias privadas.
Otros servicios profesionales, como el sello editorial, diseño gráfico, relaciones públicas y más ascienden a 155. Algo importante es que solo quedan tres tiendas de discos y tres fabricantes de discos.
En apoyo técnico, que aglutina a los estudios de grabación, luces, tarimas, sonido en vivo, entre otros, suman 214, de acuerdo con el documento enviado a Diario Libre.
Para seguir ampliando la investigación, crearon un formulario para aportar datos en el Directorio de Actores de la Música Dominicana.
¿Qué falta? Para Marijo Rodríguez y Cecilia Moltoni la difusión es muy importante. Además, buscan iniciativas de políticas públicas para el sector cultural.
“Debemos fortalecer la formación y profesionalización en las áreas de mercadeo, de ventas, de booking, de management, de sellos disqueros, de exportación de la música, todo lo que implica la parte de capitalización, de monetización de todo ese gran capital creativo que se evidencia en el mapeo. Y también incidir para que la difusión de la música y las acciones de fomento reflejen la diversidad de la música que se produce en el país, a nivel de géneros, de generaciones, de contenidos”, manifiesta Moltoni.
Objetivo del estudio
María José Rodríguez y Ceci Moltoni son dos mujeres de la industria que forman parte del equipo de 10 personas que realizó la extensa investigación dirigida por Javier Hernández desde PR y hablaron en exclusiva para Diario Libre.
El Mapeo del Ecosistema de la Música Dominicana, que consta de 99 páginas, nació con el objetivo de identificar el panorama actual de la escena local y “me atrevo a decir que superó las expectativas de todos los involucrados”, refiere Rodríguez, quien es relacionista pública y trabaja con el artista Manny Cruz.
Según detalla, en la investigación se pudieron identificar los ejes fundamentales de la variada industria dominicana para su solidificación y, además, iniciar un proceso de tipificación o clasificación. “Llegó en un momento muy importante, con una escena en pausa involuntaria por el coronavirus, ahí nos dimos cuenta más que nunca de la necesidad de estar organizados como industria para poder exigir atención ante todo lo que trajo la pandemia”, agregó.
Dinamizar la economía
La locutora y representante de artistas de la música alternativa, Cecilia Moltoni, comenta a Diario Libre que la publicación del Mapeo de la Música Dominicana responde a una necesidad de reconocernos como parte de un “ecosistema activo, dinámico, interseccional, que dinamiza la economía y la vida cultural y es vehículo de la identidad dominicana”.
La cadena de valor encontrada tiene que ver con todos los involucrados del proceso de la música como industria, desde el propio artista hasta el productor de eventos.
El flujo que debe tener la industria musical dominicana es el siguiente: formación, creación, producción, difusión, consumo y conservación.
Moltoni dijo que identificar a los artistas emergentes y todo el que está detrás de ese movimiento permite hacerlos visibles para un reconocimiento no solo colectivo, sino también del Estado dominicano, ya que cuando comenzó la pandemia no estaban organizados para solicitar ayuda.
“Es una necesidad que el Estado ha manifestado hace años y aun así no se lograba avanzar. Me refiero a armar catálogos, censos de artistas y trabajadores de la cultura porque cada disciplina es parte de ejes estratégicos en sucesivos planes de distintas gestiones. Sin embargo, nunca se avanzó”, señala la gestora cultural.
MaríaJo Rodríguez, como también se conoce a la representante de artistas, destacó que queda demostrado que República Dominicana es arte y está llena de talento, por lo que hay mucho por ofrecer en todos los géneros musicales para la proyección mundial.
“Si nos lo proponemos, podemos convertirnos en uno de los trampolines de la industria mundial. ¡Es hora de trabajar en lo nuestro y por lo nuestro!”, resalta.
Las investigadoras explican que hoy más que nunca se necesita un impulso para la etapa de distribución, difusión, capitalización, monetización y exportación de la música dominicana.
Para lograrlo se requiere un esfuerzo conjunto entre artistas, promotores, productores y con acción decidida desde el Estado dominicano. “Nos sobra calidad, pero necesitamos fortalecer las ventas y mercadeo de nuestros artistas”, asegura Cecilia Moltoni, quien representa a los artistas Vic Contreras y La Marimba.
“Es una tarea conjunta que requiere el compromiso de todos los actores. Abrir los oídos, los espacios, las políticas, las apuestas comerciales… También es de parte de los mismos músicos, de las asociaciones, de las marcas y el sector privado que apuesta a la música, de los medios de comunicación que son vitales aliados para el desarrollo de la música”, concluyen.
Previamente otras entidades habían realizado investigaciones de este tipo como la Cuenta Satélite de Cultura y la Encuesta Nacional de Consumos Culturales, esta última del Banco Central, pero no están actualizadas.