Las autoridades deben prepararse
La vacuna no llega, se retrasa, y parece que sabe a lo que se expone. Ella se supone remedio, pero cuando llegue será discordia.
Los políticos dominicanos, expertos en todo, también en pandemia, la están esperando en la bajadita, con la maldad al hombro.
Lo que sucede aquí no es diferente a otros lugares. Los políticos de oposición no pueden dejar al Gobierno librado a la mano de Dios.
Mucho más si existe la posibilidad de que salga con bien. Compartir la gloria, aunque nunca el fracaso, huérfano siempre de padre y madre.
Las autoridades deben saber lo que les viene y prepararse, pues a veces lo oficioso tiene más éxito que lo oficial.
Además de cuidar otros flancos. Por ejemplo, la vacuna que llega de contrabando y que se ofrece al mejor postor, que sería todo interesado con dinero.
Alguna agencia del Gobierno habría detectado ese comercio ilícito y andaría tras los responsables, diestros en el mercado de sustancias clandestinas.
Gente malvada que pone la vacuna y esconde la jeringa. Las farmacéuticas no están cumpliendo a tiempo, y podría darse una situación parecida a la taquilla del pley, vendida en los alrededores.