Rusia inicia calvario de dos años de sanción por dopaje sin bandera ni himno
El deporte ruso inicia el calvario de dos años de sanción por dopaje en el Mundial de Balonmano que se disputará a partir de mañana en Egipto, donde competirá sin escudo, bandera e himno.
Nada más saltar al campo el jueves ante Bielorrusia, los rusos no escucharán el himno de su país, como es habitual en los torneos internacionales.
En vez del himno ruso, cuya música es igual que el de la Unión Soviética, sonará una melodía consensuada entre el Comité Olímpico Internacional y el Comité Olímpico Ruso.
Las camisetas de la selección rusa no incluirán el escudo nacional con el águila bicéfala ni un distintivo con la bandera tricolor de la Federación Rusa.
La Federación de Balonmano de Rusia (FBR) tuvo muchas dificultades para lograr a tiempo una nueva equipación debido a las fiestas de Año Nuevo, que terminaron en este país el domingo.
«Equipo de la Federación de Balonmano de Rusia», será el nombre que los jugadores rusos portarán en la camiseta, según informó la FBR en un comunicado.
El seleccionador, el alemán Velimir Petkovic, lamentó que «por los errores cometidos por funcionarios deportivos» sus pupilos no puedan representar a su país con sus colores nacionales.
«En cualquier caso (…), el escudo y la bandera de Rusia estarán bajo las camisetas. No se pueden enseñar, pero las sentiremos», dijo.
Después del Mundial de balonmano, donde Rusia competirá al recibir una invitación, le tocará el turno a los equipos de deportes de invierno como el luge, el bobsleigh y el skeleton.
Además, la sanción incluye la prohibición de que los funcionarios rusos acudan a Mundiales y Juegos Olímpicos.
La prohibición, que es inapelable y ya no puede ser recurrida, afecta al presidente, primer ministro, ministros, miembros de la ambas cámaras del Parlamento y a otros altos funcionarios del Estado ruso.