Trabajo infantil

El trabajo es una realidad para el 13% de los menores de edad dominicanos. La cifra, que no se ha actualizado en los últimos años, podría ser mayor, a juicio de las organizaciones no gubernamentales que trabajan con este sector de la población.

Más aun, la pandemia de COVID-19 ha venido a empeorar su situación, tanto por la suspensión de las clases presenciales y por tanto de la tanda extendida que mantenía a estos menores en la escuela, como por la crisis económica que ha afectado a los adultos de sus unidades familiares.

2021 es el año dedicado por la Organización de las Naciones Unidas a la lucha para lograr la erradicación del trabajo infantil en el mundo. Toca al actual Gobierno abrazar con empeño, políticas concretas y fondos especiales la iniciativa. Esta población debe ser una prioridad, ya que el crecimiento económico de los últimos años no logró avances resaltables para sacar a ese 13% de la niñez dominicana de su situación.

El trabajo infantil no nos escandaliza; la sociedad lo ha interiorizado como inevitable. Eso es lo primero que hay que cambiar.