Magistrado Henry Molina insta a excluir discursos violentos y dialogar por mejoras de la justicia
El presidente del Poder Judicial dio ayer una respuesta contundente a las quejas de los abogados y otros actores del sistema. Dijo que el país se merece un sector judicial que deje de un lado los discursos violentos y agendas ocultas, para dialogar sobre los verdaderos problemas que aquejan a la justicia.
Al pronunciar su discurso a propósito del Día del Poder Judicial, el magistrado Luis Henry Molina consideró que el país vive un momento trascendental, en el que los ciudadanos demandan una justicia independiente y que se aplique consecuencia, en ese sentido declaró que el Poder Judicial no puede evadir ni renunciar a su rol para garantizar la seguridad jurídica y los derechos de las personas.
El también presidente de la Suprema Corte de Justicia reconoció que el Poder Judicial no es ajeno a los reclamos y las urgencias de los diferentes actores del sistema, debido a que ellos son escuchados, evaluados y procesados de acuerdo con el régimen ético y disciplinario.
Advirtió que no se dejarán presionar y trabajarán para garantizar que los jueces realicen sus funciones con plena independencia y apegados al derecho en cada una de sus sentencias. También hizo un llamado a todo el país a poner la nación dominicana en primer lugar, porque el sistema de justicia no puede quedarse estancado en el pasado.
“Pido a la comunidad jurídica y al país poner primero a la nación dominicana. Debemos comprender que el sistema de administración no puede seguir en el pasado. Es imposible cambiar haciendo lo mismo. Apostando a modelos incoherentes y a estructuras no sustentadas en criterios de eficiencia… Creo que es posible un sistema de justicia capaz de llevar el servicio a su expresión óptima”, declaró el magistrado Molina durante su alocución.
Recordó que los sistemas de justicia en todo el mundo han sido golpeados por la pandemia del COVID-19, pero que, a pesar de eso, “cada mujer y hombre que cumple una función en el Poder Judicial, desde las más modestas hasta las de mayor responsabilidad, ha puesto todo de sí para asegurar la continuidad de la administración de justicia”.
Refirió que lo que ha estado en juego en este tiempo es mucho más que la operación de una plataforma tecnológica, o la apertura de una secretaría o un tribunal en particular, pues los trabajos que se han hecho, estuvieron enfocados a evitar el riesgo del colapso completo del sistema, debido al confinamiento obligado y la pandemia.
“La magnitud del esfuerzo que hemos llevado a cabo, como ha ocurrido en la inmensa mayoría de los poderes judiciales del mundo, no tiene precedentes. No hubo recursos adicionales, ni tiempo para capacitar en profundidad al personal… apremiados por la amenaza de ver interrumpida la administración de justicia”, justificó.
Mientras el magistrado Molina realizaba su discurso en la Sala Augusta de la Suprema Corte, en presencia del presidente de la República Dominicana, Luis Abinader; el gremialista Miguel Surún tenía convocada una protesta en las afueras de la edificación.
Cuando Surún salió, comenzaron los gritos, y la manifestación se tornó violenta, debido a que en el lugar había grupos que apoyaban a Surún y otros que estaban en contra.
En la manifestación se dieron momentos de tensión cuando una mujer (se desconoce si es abogada) sacó un cuchillo de manera desafiante, señalando a unos de los manifestantes. Sin embargo, intervinieron agentes de la Policía y evitaron que se produjera alguna agresión o herida. La mujer fue arrestada.
Miguel Surún convocó la protesta para desmerecer el discurso del presidente del Poder Judicial y reclamar “el cese de los abusos y de las cancelaciones injustificadas de los servidores del sistema”. Dijo que la Justicia se encuentra en su peor momento.